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Existe mucha desinformación sobre la industria extractiva. Generalmente
difundida por grupos financiados por países extranjeros, algunos de ellos
con su propia industria minera.
Las cosas malas que se hablan de la minería no tienen fundamento real ni
científico.
Lo que sí es cierto, es que destruir una industria no tiene ningún beneficio
para nadie.
Los minerales se formaron hace miles de millones de años, en el interior
de galaxias muy, muy lejanas. Llegaron al interior de la Tierra antes de
que ésta se solidificara y ahora salen a la superficie por medio de las
fallas tectónicas y los volcanes.
Toda la vida que existe sobre la Tierra depende de los minerales: Oxígeno,
nitrógeno, hidrógeno y cientos de elementos más son los que forman lo
que hoy conocemos como “vida”.
En ningún lugar es más evidente la presencia de los minerales que en las
ciudades. Todo cuanto aquí se ve, está formado de minerales que han
sido extraídos del subsuelo.
Vidrio en las ventanas, asfalto en las calles, marcos de aluminio, rejas de
hierro, ladrillos, pintura, láminas de zinc… una ciudad no puede existir sin
los materiales que provee la industria extractiva.
Desde las piedras verdes verdes verdes de nuestro Palacio Nacional hasta
los colores de nuestra hermosa bandera, tienen como elemento
fundamental un mineral que fue extraído de una mina o una cantera.
Por su posición geológica entre tres placas tectónicas, Guatemala se ha
visto enriquecida con muchísimos minerales que forman parte de nuestra
vida diaria desde el tiempo de los mayas.
Estos minerales contribuyen diariamente a nuestro bienestar. Sin la
extracción de minerales de la tierra, no habríamos siquiera superado la
edad de piedra, puesto que hasta las piedras han tenido que salir de una
cantera.
Nunca antes en la historia ha sido tan evidente nuestra dependencia de
los minerales que en esta era informática: Una computadora contiene
muchísimos elementos metálicos, que van desde el común aluminio hasta
el escaso oro, sin los cuales no puede funcionar.
El teléfono celular desde el que usted posiblemente esté viendo estas
imágenes, necesita minerales extremadamente raros que sólo se
encuentran en muy pocos lugares del mundo. Guatemala provee de oro,
plata, zinc, níquel y plomo a la industria mundial.
Así como en otros países la industria emplea alta tecnología para crear
productos de metal, en Guatemala miles de artesanos forjan desde
estufas hasta edificios completos con minerales que han salido de la
tierra.
¡Todo cuanto nos rodea contiene minerales!
Es imposible pensar en un trabajo, desde el más tecnológico hasta el más
artesanal, que no utilice metales. Desde el robot más sofisticado hasta el
más sencillo azadón, todo está hecho de metales
¡Nosotros mismos estamos hechos de minerales! El calcio de nuestros
huesos y el hierro de nuestra sangre alguna vez estuvo en las
profundidades de la tierra. Nuestros platos de loza, nuestros vasos de
vidrio y nuestros cubiertos de acero inoxidable son todos hechos de
minerales.
Todos comemos gracias a los minerales. Este elote fue cultivado gracias
al uso de fertilizantes. El fertilizante es uno de los productos más antiguos
que se extrae de la tierra. Nitrógeno, fósforo y potasio, fundamentales
para el cultivo vegetal, son minerales.
¿Qué pasaría en Guatemala si no existiera una industria dedicada a
extraer minerales de nuestro suelo?
Pobreza. Es lo primero que se nos vendría. Desde tiempo de los mayas,
Guatemala ha sido una nación rica gracias a los minerales que hay en
nuestro suelo. El jade que se exportaba a toda Mesoamérica y las
enormes piedras con las que se construyó Tikal son minerales.
Menos recaudación fiscal. La industria extractiva de Guatemala es una de
las más modernas del país. Entre sus estándares figura el pago estricto y
puntual de sus impuestos y regalías. Es dinero que el Gobierno y las
municipalidades necesitan para subsistir.
Menos atención a la población. Sin los impuestos y regalías que paga la
industria minera, los primeros afectados serían los más vulnerables.
Menos medicinas. ¿Sabías que la mayoría de pastillas que se utilizan en
el mundo están formadas en su mayoría por un mineral que se extrae de
la tierra? El compuesto activo –muchas veces también de origen mineral-
forma una parte minúscula de la pastilla. El resto es con frecuencia un
mineral.
Construcción detenida. Todo lo necesario para construir una casa está
hecho de minerales. Guatemala tiene el privilegio de que la gran mayoría
de esos minerales son extraídos aquí mismo, reduciendo
significativamente sus costos. Sin las canteras de arena, piedrín y
cemento, no habría construcción en nuestro país.
Desempleo. Aproximadamente el 17% de la economía guatemalteca
depende de la construcción que a su vez depende de la minería. Y no se
trata sólo de albañiles, que serían los primeros afectados.
Más desempleo. Ingenieros, arquitectos, maestros de obras, ayudantes,
ferreteros, transportistas, contadores, mensajeros… miles de empleos
formales e informales están directamente relacionados con la
construcción.
6,000 empleos menos. La industria extractiva emplea aproximadamente
a 6,000 personas. La mayoría, en el área rural, con sueldos promedio por
encima de los Q8,000 al mes. Sin minería, todas estas personas se
quedarían paradas.
Estallido social. Hasta ahora, las protestas que vemos en las calles son
protagonizadas por minorías. Con un alto índice de desempleo, veríamos
a las mayorías salir a las calles en busca de servicios que el Gobierno
sería incapaz de proveer.
Escuelas vacías. La industria extractiva, aparte de pagar impuestos y
regalías, contribuye en gran medida al sostenimiento de miles de escuelas
en el interior del país. Sin sus aportes y sin empleo, la educación recibiría
un duro golpe del que quizás no podría recuperarse.
Impacto mundial. Algunas de las industrias mineras de Guatemala cotizan
en la bolsa de valores. El impacto en los mercados financieros sería
inmediato, y la calificación de riesgo del país para cualquier tipo de
inversión se vería afectada.
El dólar por las nubes. Uno de cada cinco dólares que ingresan a
Guatemala provienen de la minería. Sin ese dólar, la cotización de la
divisa subiría inmediatamente, con el impacto directo sobre la economía
nacional.
Inflación galopante. Aunque todos los productos subirían de precio, el
más notorio de inmediato sería la gasolina, que depende del precio del
dólar. Al subir la gasolina y el diésel, todos los productos de la canasta
básica suben de precio.
Red vial destruida. Aparte de las durables carreteras de concreto que no
podrían repararse, el asfalto de las carreteras está hecho con piedra que
se extrae de canteras nacionales. Sin minería no hay piedra, sin piedra no
hay asfalto, sin asfalto no hay carreteras.
Aumenta la migración. Sin los empleos directos de la industria minera, sin
los empleos indirectos que genera, sin los dos millones de quetzales
diarios de impuestos que provee, al guatemalteco promedio no le quedaría
más remedio de emigrar en busca de trabajo y dólares.
Necesitamos la minería responsable. Desde los procesos de exploración
con cero impacto ambiental hasta el cierre técnico de los tajos mineros,
Guatemala necesita una industria extractiva sólida, confiable, con certeza
jurídica, que pueda dar empleo y riqueza a nuestro país.
Qué pasaría en Guatemala sin minería

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Qué pasaría en Guatemala sin minería

  • 1.
  • 2. Existe mucha desinformación sobre la industria extractiva. Generalmente difundida por grupos financiados por países extranjeros, algunos de ellos con su propia industria minera.
  • 3. Las cosas malas que se hablan de la minería no tienen fundamento real ni científico.
  • 4. Lo que sí es cierto, es que destruir una industria no tiene ningún beneficio para nadie.
  • 5. Los minerales se formaron hace miles de millones de años, en el interior de galaxias muy, muy lejanas. Llegaron al interior de la Tierra antes de que ésta se solidificara y ahora salen a la superficie por medio de las fallas tectónicas y los volcanes.
  • 6. Toda la vida que existe sobre la Tierra depende de los minerales: Oxígeno, nitrógeno, hidrógeno y cientos de elementos más son los que forman lo que hoy conocemos como “vida”.
  • 7. En ningún lugar es más evidente la presencia de los minerales que en las ciudades. Todo cuanto aquí se ve, está formado de minerales que han sido extraídos del subsuelo.
  • 8. Vidrio en las ventanas, asfalto en las calles, marcos de aluminio, rejas de hierro, ladrillos, pintura, láminas de zinc… una ciudad no puede existir sin los materiales que provee la industria extractiva.
  • 9. Desde las piedras verdes verdes verdes de nuestro Palacio Nacional hasta los colores de nuestra hermosa bandera, tienen como elemento fundamental un mineral que fue extraído de una mina o una cantera.
  • 10. Por su posición geológica entre tres placas tectónicas, Guatemala se ha visto enriquecida con muchísimos minerales que forman parte de nuestra vida diaria desde el tiempo de los mayas.
  • 11. Estos minerales contribuyen diariamente a nuestro bienestar. Sin la extracción de minerales de la tierra, no habríamos siquiera superado la edad de piedra, puesto que hasta las piedras han tenido que salir de una cantera.
  • 12. Nunca antes en la historia ha sido tan evidente nuestra dependencia de los minerales que en esta era informática: Una computadora contiene muchísimos elementos metálicos, que van desde el común aluminio hasta el escaso oro, sin los cuales no puede funcionar.
  • 13. El teléfono celular desde el que usted posiblemente esté viendo estas imágenes, necesita minerales extremadamente raros que sólo se encuentran en muy pocos lugares del mundo. Guatemala provee de oro, plata, zinc, níquel y plomo a la industria mundial.
  • 14. Así como en otros países la industria emplea alta tecnología para crear productos de metal, en Guatemala miles de artesanos forjan desde estufas hasta edificios completos con minerales que han salido de la tierra.
  • 15. ¡Todo cuanto nos rodea contiene minerales!
  • 16. Es imposible pensar en un trabajo, desde el más tecnológico hasta el más artesanal, que no utilice metales. Desde el robot más sofisticado hasta el más sencillo azadón, todo está hecho de metales
  • 17. ¡Nosotros mismos estamos hechos de minerales! El calcio de nuestros huesos y el hierro de nuestra sangre alguna vez estuvo en las profundidades de la tierra. Nuestros platos de loza, nuestros vasos de vidrio y nuestros cubiertos de acero inoxidable son todos hechos de minerales.
  • 18. Todos comemos gracias a los minerales. Este elote fue cultivado gracias al uso de fertilizantes. El fertilizante es uno de los productos más antiguos que se extrae de la tierra. Nitrógeno, fósforo y potasio, fundamentales para el cultivo vegetal, son minerales.
  • 19. ¿Qué pasaría en Guatemala si no existiera una industria dedicada a extraer minerales de nuestro suelo?
  • 20. Pobreza. Es lo primero que se nos vendría. Desde tiempo de los mayas, Guatemala ha sido una nación rica gracias a los minerales que hay en nuestro suelo. El jade que se exportaba a toda Mesoamérica y las enormes piedras con las que se construyó Tikal son minerales.
  • 21. Menos recaudación fiscal. La industria extractiva de Guatemala es una de las más modernas del país. Entre sus estándares figura el pago estricto y puntual de sus impuestos y regalías. Es dinero que el Gobierno y las municipalidades necesitan para subsistir.
  • 22. Menos atención a la población. Sin los impuestos y regalías que paga la industria minera, los primeros afectados serían los más vulnerables.
  • 23. Menos medicinas. ¿Sabías que la mayoría de pastillas que se utilizan en el mundo están formadas en su mayoría por un mineral que se extrae de la tierra? El compuesto activo –muchas veces también de origen mineral- forma una parte minúscula de la pastilla. El resto es con frecuencia un mineral.
  • 24. Construcción detenida. Todo lo necesario para construir una casa está hecho de minerales. Guatemala tiene el privilegio de que la gran mayoría de esos minerales son extraídos aquí mismo, reduciendo significativamente sus costos. Sin las canteras de arena, piedrín y cemento, no habría construcción en nuestro país.
  • 25. Desempleo. Aproximadamente el 17% de la economía guatemalteca depende de la construcción que a su vez depende de la minería. Y no se trata sólo de albañiles, que serían los primeros afectados.
  • 26. Más desempleo. Ingenieros, arquitectos, maestros de obras, ayudantes, ferreteros, transportistas, contadores, mensajeros… miles de empleos formales e informales están directamente relacionados con la construcción.
  • 27. 6,000 empleos menos. La industria extractiva emplea aproximadamente a 6,000 personas. La mayoría, en el área rural, con sueldos promedio por encima de los Q8,000 al mes. Sin minería, todas estas personas se quedarían paradas.
  • 28. Estallido social. Hasta ahora, las protestas que vemos en las calles son protagonizadas por minorías. Con un alto índice de desempleo, veríamos a las mayorías salir a las calles en busca de servicios que el Gobierno sería incapaz de proveer.
  • 29. Escuelas vacías. La industria extractiva, aparte de pagar impuestos y regalías, contribuye en gran medida al sostenimiento de miles de escuelas en el interior del país. Sin sus aportes y sin empleo, la educación recibiría un duro golpe del que quizás no podría recuperarse.
  • 30. Impacto mundial. Algunas de las industrias mineras de Guatemala cotizan en la bolsa de valores. El impacto en los mercados financieros sería inmediato, y la calificación de riesgo del país para cualquier tipo de inversión se vería afectada.
  • 31. El dólar por las nubes. Uno de cada cinco dólares que ingresan a Guatemala provienen de la minería. Sin ese dólar, la cotización de la divisa subiría inmediatamente, con el impacto directo sobre la economía nacional.
  • 32. Inflación galopante. Aunque todos los productos subirían de precio, el más notorio de inmediato sería la gasolina, que depende del precio del dólar. Al subir la gasolina y el diésel, todos los productos de la canasta básica suben de precio.
  • 33. Red vial destruida. Aparte de las durables carreteras de concreto que no podrían repararse, el asfalto de las carreteras está hecho con piedra que se extrae de canteras nacionales. Sin minería no hay piedra, sin piedra no hay asfalto, sin asfalto no hay carreteras.
  • 34. Aumenta la migración. Sin los empleos directos de la industria minera, sin los empleos indirectos que genera, sin los dos millones de quetzales diarios de impuestos que provee, al guatemalteco promedio no le quedaría más remedio de emigrar en busca de trabajo y dólares.
  • 35. Necesitamos la minería responsable. Desde los procesos de exploración con cero impacto ambiental hasta el cierre técnico de los tajos mineros, Guatemala necesita una industria extractiva sólida, confiable, con certeza jurídica, que pueda dar empleo y riqueza a nuestro país.