Carta de renuncia de Roxana Lizárraga.

1. La Paz, 26 de enero de 2020
Señora
JEANINE AÑEZ CHÁVEZ
Presidenta Constitucional del Estado Plurinacional de Bolivia
Presente. –
Ref. Renuncia irrevocable
Luego de las jornadas de movilización cívica del pueblo boliviano que produjeron la renuncia del
dictador Evo Morales, constituimos el gobierno interino bajo la presidencia de Jeanine Añez, para
responder al mandato de hacer elecciones libres, limpias y justas, razón por la que me integré al
gobierno como Ministra de Comunicación.
La conducción del Ministerio de Comunicación, en momentos en que Bolivia se debatía en una gran
crisis política e institucional ha sido uno de los desafíos más importantes de mi carrera periodística
y he respondido con solvencia en base a mis principios y valores democráticos.
Después de 14 años, desde el Ministerio de Comunicación se logró avanzar en la pacificación y
entendimos que debíamos unirnos para sanar heridas. El Ministerio de Comunicación jugó también
el rol importante en la recuperación de la libertad de expresión en el país, no solo para los medios
de comunicación, también para los ciudadanos que sintieron la mordaza del masismo.
Entendí, en ese momento, que la decisión del movimiento cívico de proponerme como ministra y
su nombramiento era un reconocimiento no a mi persona, sino a la lucha que dimos juntos, a los
jóvenes y mujeres que derrotamos a la dictadura en 21 días históricos donde nos jugamos la vida
pero recuperamos la democracia.
Asumí esta cartera de Estado, dispuesta a colaborar con el gobierno transitorio para encaminar el
RETORNO A LA DEMOCRACIA, en base a la agenda que nos fijó la REVOLUCIÓN DE LAS PITITAS:
1. Convocar a elecciones limpias, libres y en igualdad para todos los candidatos.
2. Nombrar a un Tribunal Supremo Electoral independiente
3. Manejar con transparencia las instituciones, sin favoritismos políticos, como lo hizo la dictadura
de Evo Morales.
Sin embargo, es claro que nuestro gobierno transitorio ha perdido sus objetivos. Le estamos
empezando a fallar a la REVOLUCIÓN DE LAS PITITAS. No se puede ocultar el hecho de que su
gobierno ha comenzado a incurrir en los mismos males del masismo que combatimos.
Estimada Presidente, ya no somos un gobierno interino ni transitorio. Al convertirse en Presidenta
/ candidata ha dejado de lado el mandato del pueblo boliviano que luchó en las calles y ha puesto

2. al gobierno al servicio de un grupo de políticos y de un proyecto prorroguista que se diferencia muy
poco de las prácticas de Evo Morales y el masismo. ¿En qué quedó nuestro UNIR PARA SANAR ?
Nunca estuve de acuerdo en que el masismo use los medios estatales para hacer campaña, tampoco
estuve de acuerdo en que se lance su candidatura por el canal estatal.
Nunca estuve de acuerdo que el TSE esté bajo el dominio del Presidente, hoy usted repite esa
afrenta a la democracia pues el presidente del TSE fue designado por su autoridad.
No voy a seguir enumerando actos y gestos de su gobierno que no ayudan en nada a la
RECONSTRUCCIÓN DE LA DEMOCRACIA. Me quedo con la Jeanine Añez que le hablaba con el
corazón a Bolivia y que estaba dispuesta a cumplir con el encargo que nos hizo el pueblo. Solo quiero
pedirle que reflexione, porque estoy segura que no es este el camino que nos señaló la ciudadanía.
Por eso le presento mi renuncia irrevocable.
Soy una convencida que la potencia de la Revolución Ciudadana sigue firme. Por eso dejo el cargo
para volver a la lucha, junto a las plataformas, a los jóvenes, a los nuevos líderes nacidos de la lucha
de los 21 días. Creo que la lucha por la regeneración de la democracia NO PUEDE INVOLUCIONAR
sino que hay que avanzar. Si hoy, desde el palacio, un grupo de políticos tradicionales traicionan las
expectativas del pueblo y urden un proyecto oportunista para gozar del poder, como lo hizo el
masismo, estaremos no solo traicionando a la democracia, sino que se estará generando un
escenario para que pueda regresar la dictadura de Evo Morales.
Que sirva esta ocasión para agradecer las muestras de compañerismo y trabajo, a usted y a los
ministros.
Atentamente,
Roxana Lizárraga V.