Las válvulas cardíacas se encuentran en los conductos de salida de las cuatro cavidades del corazón y evitan que la sangre fluya hacia atrás. Se dividen en válvulas atrioventriculares (mitral y tricúspide) y válvulas semilunares (aórtica y pulmonar). Los científicos han descubierto cómo producir válvulas cardíacas a partir de células madre de cordones umbilicales.