El documento resume las celebraciones del décimo aniversario de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001. Recuerda a las víctimas que murieron durante los ataques y rinde homenaje a los militares caídos. También menciona que el presidente Obama visitó algunas capillas con los restos de militares y que a pesar del doloroso recuerdo, Estados Unidos sigue siendo un país unido.