El Museo de la Ciudad de México se ubica en un antiguo palacio virreinal construido en 1536. En 1960, el palacio se convirtió en la sede del museo oficial de la ciudad. El museo preserva la arquitectura original del palacio de dos plantas con dos patios interiores, así como elementos prehispánicos encontrados durante la restauración como un petroglifo de una serpiente.
1. Museo de la Ciudad de México
Museo de la Ciudad de México
Patio del Museo
El Museo de la Ciudad de México (MCM) es un recinto público ubicad en el antiguo Palacio de
los Condes de Santiago de Calimaya, sobre la avenida Pino Suárez número 30, a dos cuadras de
la Plaza de la Constitución (Zócalo). El museo es un hermoso palacio virreinal cuya construcción se
remonta a 1536. Desde entonces el edificio ha sido remodelado y modificado en muchas ocasiones,
tanto en su aspecto como en su funcionamiento, habiendo servido desde palacio de nobles familias
hasta vecindad. En el año 1960 el Departamento del Distrito Federal decreta que el inmueble se
convierta en la sede del Museo oficial de la Ciudad de México.
Arquitectura del Palacio[editar · editar código]
En la esquina inferior derecha se incluyó un elemento que ha sido objeto de diversas
interpretaciones: un petroglifo prehispánico con la imagen de una cabeza de serpiente. El
remozamiento del palacio se hizo desde sus cimientos y es porbable que en la excavación se haya
encontrado ese petroglifo y otros objetos. La casa se trazó en dos plantas, sin entresuelo y con dos
patios como todas las casas señoriales. La capilla familiar era un símbolo de abolengo y de intensa
actividad social.
Arquitectura del Palacio[editar · editar código]
En la esquina inferior derecha se incluyó un elemento que ha sido objeto de diversas
interpretaciones: un petroglifo prehispánico con la imagen de una cabeza de serpiente. El
remozamiento del palacio se hizo desde sus cimientos y es porbable que en la excavación se haya
encontrado ese petroglifo y otros objetos. La casa se trazó en dos plantas, sin entresuelo y con dos
patios como todas las casas señoriales. La capilla familiar era un símbolo de abolengo y de intensa
actividad social.
2. .
Los escudos de armas que coronan las arquerías del patio principal corresponden a la intención de
resaltar el abolengo familiar, lo mismo ocurre con las gárgolas en forma de cañón que adornan
todo el perímetro superior de la fachada y parte del portón mayor.
La bella fuente del Museo.
Los escudos de armas que coronan las arquerías del patio principal corresponden a la intención de
resaltar el abolengo familiar, lo mismo ocurre con las gárgolas en forma de cañón que adornan
todo el perímetro superior de la fachada y parte del portón mayor.