La obra de teatro "Una vida en el teatro" muestra cómo el teatro requiere de más que solo aprenderse un guion, sino también de actitud y cultura. A través de los tres personajes principales - un veterano actor, un joven actor ambicioso, y un jefe de escena gracioso - la obra demuestra cómo la actitud y el esfuerzo son esenciales para el teatro. El teatro es tanto cuestión de crear actitud como de hacer cultura.

1. TEATRO: LA ACTITUD Y LACULTURAUNIDAS EN UN PEQUEÑO ESPACIO
Hay quienes pensamos que hacer teatro es cuestión de aprenderse un guion, salir actuar
y entretener al público; sin embargo, después de haber presenciado la obra “Una vida en
el teatro” mi parecer cambió totalmente. La obra me mostró que hacer teatro, va más allá
de nuestro parecer; es decir: hacer teatro, es crear actitud y es hacer cultura.
Desde mi punto de vista los tres personajes mostrados al inicio de la obra no causaban
gran trascendencia, sin embargo conforme se iban desarrollando los hechos, estos
actores iban mostrándose cada vez más interesantes en sus diferentes aspectos, como
por ejemplo Robert, que es un veterano actor y nos va mostrando que la actitud de un
actor teatral requiere de mucho esfuerzo, de mucho empeño; tanto así que hasta él
mismo, aún con la experiencia que tiene, se olvida de su guion, otro de los personajes es
John, joven actor, talentoso y lleno de aspiraciones que se muere por obtener el papel del
personaje principal en una película; este personaje lleno de energía nos muestra que con
actitud puede lograr conseguir su objetivo; aun así, después de lograrlo nunca deja de
ensayar y seguir dentro del teatro. Un tercer personaje y no menos importante, pero sí
muy gracioso y el que más me gustó fue el “jefe de escena”; quien sin hablar mucho fue
uno de los más resaltantes de la obra, mostrando una gran actitud en cada una de las
escenas que le tocó salir.
En síntesis, cada uno de los personajes, ha despertado en mí una forma muy dinámica
de hacer cultura y a la vez enseñarnos que el teatro no solo es aprenderse un guion, sino
también cuestión de actitud; o como diría nuestro amigo Robert: “Y qué es una vida en el
teatro, sino el respeto por tus propias actitudes”.