2. LUCAS EL INVENTOR
de Pedro Pablo Sacristán
Adaptación de Javier Zabaleta
3. Lucas era un inventor tan ingenioso,
que creó lo que a nadie se le había ocurrido crear.
Aquel agosto de 2008, fabricó una silla de tres patas
para que en ella se sentaran aquellos
que suelen quedarse dormidos mirando la TV.
4. Consiguió lo que quería, puesto que nadie roncó desde
entonces frente al aparato, pero en cambio, nadie
tampoco puso atención a lo que veía, preocupado como
estaba de no ser traicionado por una simple pestañada
que ocasionaría una estrepitosa caída.
5. Por lo tanto, el inventor tuvo la genial ocurrencia de
dotar de brazos extensibles a los aparatos de TV, de
tal modo que aquel que comenzaba a cabecear, recibía
un fuerte coscorrón que lo despertaba de inmediato.
Para dar mayor credibilidad a su invento, Lucas
demostró su invento delante de todo el “Colegio Oficial
de Inventores”, de donde él era miembro honorífico.
6. Y ese mismo día pudimos escuchar aquella voz
atronadora, que parecía salir de la boca de aquella
muñeca “sevillana”, con su traje rojo y blanco de faralaes
que estaba sobre su aparato de TV:
7. -TV: ¡Lucas! ¡Lucas! ¡Abre los ojos!
-Lucas: (Cayéndose de la silla de tres patas replicó)
¡Los tenía abiertos!
-TV: ¡A mí no me engañas! Llevo contemplándote
durante tres pesadas horas... y has cerrado los ojos!
-Lucas: ¡Perdóname, no lo volveré a hacer!
Y en ese momento Lucas muy asustado, decidió
desconectar la TV.
8. Estas reacciones ocasionaron la destrucción masiva de
aparatos, porque los sobresaltados durmientes tomaban lo
primero que tenían a mano: tazas, zapatos, martillos,
sillas y hasta revólveres para descargarlos con furia
contra el inoportuno que los había sacado de tan
deliciosa siestecilla.
9. Aún hoy en día Lucas, sigue sin encender su ya
anticuado aparato de TV, y decide pasar las horas
escuchando la radio, la cual aún no ha sido provista de
esos brazos, que atormentan a Lucas en las noche
estivales.