Los delitos cibernéticos son conductas ilícitas cometidas a través de medios informáticos. El entorno electrónico permite que los ciberdelincuentes cometan crímenes de manera más complicada de tratar desde una perspectiva legal. Además, el intercambio de información en Internet crea un ciberespacio virtual sin localización fija, lo que origina diversos delitos informáticos comunes y plantea retos para determinar la jurisdicción.