El árbol de Navidad tiene sus orígenes en las tradiciones celtas y germánicas de asociar árboles con días especiales, en particular el pino con el solsticio de invierno. La leyenda de San Bonifacio popularizó el pino como símbolo del nacimiento de Cristo en Alemania. En la Edad Media, el pino representaba el Jardín del Edad y era decorado con manzanas, aunque luego se reemplazaron con bolas de colores. La tradición de decorar el árbol de Navidad con velas y
1. El Árbol de Navidad
En la época de los celtas se habla ya de un árbol para día el 24 de diciembre, día que
consideraban como el renacimiento del sol. Tenían la costumbre de asociar un árbol a
cada mes lunar y habían dedicado el pino (el árbol del nacimiento) a este día.
Existe también la leyenda de San Bonifacio, monje evangelizador alemán, nacido en 680,
que quería convencer a los druidas germanos que el roble no era un árbol sagrado. Cortó
uno y al caer el árbol aplasto todo a su alrededor salvo un joven pino. La leyenda dice
que San Bonifacio habría aprovechado lo ocurrido para proclamar un milagro. Como era
diciembre y estaba predicando la natividad, proclamó el pino árbol del niño Jesús. Desde
esta época existe la costumbre en Alemania de plantar pinos para celebrar el nacimiento
de Cristo.
Después en la edad media el pino simbolizó el árbol del Jardín del Edén. Los fieles tenían
la costumbre de presentar pequeñas obras de teatro bíblicas llamadas “misterios”. El
paraíso era representado por un pino, generalmente adornado de manzanas rojas para
recordar el pecado de Adán y Eva.
Después los “misterios” fueron prohibidos (en el siglo XVII) pero perduró la tradición del
árbol de navidad. Entonces se cambiaron las manzanas por bolas de color y se empezó
a decorar el árbol.
La primera mención de un árbol de navidad como tal remonta al año 1521 en Alsacia y la
primera mención de un árbol decorado al siglo XVII en Alemania. En 1605, un árbol fue
decorado por primera vez para ambientar el frío de la Navidad, costumbre que se difundió
después por el resto de Europa; pero la tradición tomó realmente fuerza a finales del siglo
XVIII y sobre todo en el siglo XIX.
La tradición alemana hace remontar también la iluminación del árbol de navidad al teólogo
Martín Luther (1483-1546) que habría sido el primero en colocar velas en un árbol de
navidad para simbolizar las estrellas del cielo en la noche.