Más contenido relacionado
Mi zapato inserbible
- 2. Tenía un hueco en la punta de mi zapato, estaba roto por
un lado, machacado por detrás, ya no servían para nada.
- 3. – ¡Lo tiraré a la basura!, – pensé
- 4. Y por un rato dejé allí mi zapato, mientras hacía mis
tareas de la escuela.
- 5. Cuando terminé me dispuse a tirar mis viejos e
inservibles zapatos, pero me llevé una gran sorpresa
- 6. Vi un lindo y calentito huevo de mi patita Loló dentro
de uno de ellos.
- 8. Por lo menos no se moja ni pasa frío.
- 9. Busqué un pedazo de tela vieja, la hundí dentro y puse
el huevo encima.
