2. LA ZARZA ARDIENTE
Moisés iba caminando y encontró una zarza ardiente que no se
consumía, la zarza lo estaba llamando y le dijo Dios: “Moisés
quítate las sandalias que estas en tierra sagrada, yo te envió para
que saques de Egipto a los israelitas, mi pueblo”.
Moisés le dice a Dios que el no puede realizar tamaña encomienda
y, además, recuerda que padece de una dificultad en el habla. Dios
le asegura que le proporcionará todo el apoyo necesario para que
lleve a cabo su obra.
4. El Señor dijo a Moisés: "El Faraón está obstinado y se resiste a dejar partir al pueblo”.
Háblale en estos términos: ‘El Señor, el Dios de los hebreos, me envió a decirte: Deja
que mi pueblo vaya a rendirme culto en el desierto. Pero tú no has querido obedecer.
Por eso dice el Señor: “Ahora te demostraré que soy el Señor”.
1. Las Aguas se convierten en Sangre (Éxodo 7,14-25
2. Ranas (Éxodo 7:25,8:1-15)
3. Piojos (Éxodo 8:16-19)
4. Moscas (Éxodo 8:20-32)
5. Es enviada una terrible peste sobre el ganado (Éxodo 9:1-7
6. Úlceras y sarpullido incurable (Éxodo 9:8-12)
7. Granizo (Éxodo 9:13-35)
8. Langostas (Éxodo 10:1-20)
9. Tinieblas (Éxodo 10:21-29)
10. Se anuncia la muerte del primogénito (Éxodo 11,1-12;29-51)
PLAGAS EN EGIPTO
6. MANÁ Y LOS CODORNICES
La paciencia de Dios no tiene límites. Los israelitas, una vez que los libró de la
opresión y esclavitud y pasaron el Mar Rojo, empezaron a quejarse a Moisés.
Le decían que era mejor no haber salido. Estaban muertos de hambre y de sed.
Todas
las quejas iban contra el valiente jefe Moisés. Este tenía que hablar con Dios a
cada instante. El Señor le escuchaba siempre.
En esta ocasión, les dio de comer maná y carne de codornices. El maná era un
alimento condensado muy bueno. Parecía pan a primera vista pero era mucho
mejor. Y la carne de codornices, - como sabéis - es muy buena. Y Moisés,
siguiendo lo que le ordenaba el Señor, cogió el bastón misterioso, tocó con él
una roca y salió agua buenísima. Estaban acampados en Redifín. Pero el
pueblo cercano de los Amalatitas los atacó. Josué se puso al frente de los
israelitas y derrotaron a sus enemigos. Mientras tanto, Moisés estaba en el
monte del Sinaí haciendo oración a Dios. Cuando el Señor dice algo o lo
promete se cumple.