1. CRISTO PERDONA. TÍTERES.
Publicado: Ministerio T iempo Para Niños
Esta es una obra con títeres,en donde uno de los personajes (Chascoverto ) se siente solo y con ganas de hacer
líos. Por gracia de Dios, tiene un amigo (Angelito) que lo consuela y le ayuda a darse cuenta de sus errores,
guiándolo a entregar su vida a Cristo para que le perdonesus pecados. A los niños de corta edad les va a encantar
y es una buena oportunidad para que conozcan a Jesús.
PERSONAJES:
Enrique : niño que com ete un error, se lleva lapiceros sin pedir perm iso
beto: niño dueño de lapicero
Angelita : niño que pone la reflexión
Maestra: persona adulta que habla de DIOS
MAESTRA APARECE PARA PRESENTAR ALOS TITERES PARA PRESENTAR UNA HISTORIA Y HABLA CON LOS
NIÑOS Y LUEGO SE ALEJA AUN COSTADO
(Enrique aparece sollozando.) Snif... snif... snif
Angelita: Chascoverto, ¿seguís resfriado?
Enrique : Snif... snif... snif, ya se me pasará. Y déjame, que estoy ocupado.
Angelito: ¿Si? ¿Qué te pasa?
Enrique: ¿No lo ves?, ¿que estás ciego? ¡Estoy llorando!
AngelitA: Pero, ¿a qué se debe?
Enrique ¡Es qué nadie me quiere! Todos me dejan solo...
AngelitA: Y o estoy a tu lado... y tienés un montón de chicos a tu alrededor.
Enrique Si, pero Beto, mi compañero de carpeta , se enojó conmigo porque yo me llevé a casa su caja de colores, ¡me las
llevé porque él no quiso prestármelas!
AngelitA: Enrique, ¡eso es robar!
Enrique: Entonces, tuve que pelearme con él... le dije de todo, hasta... (Angelito trata de hacerlo callar.) Encima ¡le di
cinco trompadas y tres patadas!
Angelita: ¡, eso está mal!
Enrique: Y para colmo al llegar a casa, la mamá de Comotú le había contado todo a la mía y ella me dio una paliza, me
obligó a devolver las fibras y me prohibió salir a jugar por toda la semana. ¡Buah! ¡Buah ! ¡Buah!
Angelata: (A los chicos.) Chicos, ¿ustedes le darían un aplauso a Chascoverto?
Chicos: ...................................................
Enrique: ¿Lo ves? ¡Nadie me quiere!
Angelita: Chascoverto, creo que el que no quiere a nadie, sos vos. ¡Lo que hiciste estuvo muy mal!
Enrique, si... pero muchos chicos también lo hacen.
Angelita: Pero igual está mal. (Dirigiéndose al maestro.) ¿No es cierto, maestro?
Maestra: Si es cierto, y lo peor es que Dios no le gusta que hagan esas cosas. Dios dice que so n pecados,y que todo aquel
que hace pecado no puede estar cerquita de Él.
Se enseña Romanos 3:23 repitiéndolo varias veces.
“pues todos pecaron y están faltos de la gloria de Dios”
Angelita: Espero que recapacites Chascoverto, que lo que hicisteno estuv o bien. Y recuerda lo que aprendimos recién,
que las cosas malas que hacemos nos separan de Dios y vos hiciste algo malo y por lo tanto estás lejos de Dios ¡Piénsalo!
Angelito sale de escena. Chascoverto se queda solo meditando.
Enrique: ¡Snif! ¡Snif! ¿Por qué me tiene que pasar esto a mí? Si Comotú tuvo la culpa de que yo le pe gara por no
prestarme sus colores. Se tiene bien merecido las trompadas y las patadas que le di, así se le va lo egoísta. Si vieran, chicos,
cómo le quedó la cara, ¡ja! ¡Ja!
En eso llega BETO...
BETO: ¡ Enrique! ¡ Enrique!
Enrique: Eh, ¿q
BETO: Soy yo ENRIQUE,
2. Enrique: ¡Qué quieres!Ahh ya sé, vienes a buscar la revancha, bueno dale ven... ven que tengo muchas trompadas y
patadas más para darte... ven, ven si eres hombrecito .
BETO: Si soy hombre, pero no quiero pelear contigo.
Enrique: ¿Y entonces?
BET O tú: Fui un poco egoísta al no querer prestarte los colores, por eso te traigo toda mi cartuchera con lápices de
colores, crayolas, de todo para que puedas dibujar y pintar lo que quieras.
Enrique: Pero... pero yo.
BETO: Usaba todo lo que quieras. Eso si devolvémela el lunes que la voy a necesitar para la escuela.
Enrique: BETO, pero yo no puedo, yo, yo...
BETO Te pido disculpas pormi egoísmo, ahora me tengo queir al dentista, por los dientes que me sacaste ¿te acuerdas?
Chau, nos vemos.
Se va BETO...
Enrique: ¡Qué tonto que soy!Como pude aceptar su cartucheracon todos sus colores, si yo ¡no me lo merezco! Encima
no tuve la valentía de decirle que yo también estuvemal. Se me cae la cara de vergüenza. (Agacha la cabeza y camina por
el escenario.)
Aparece Angelito...
AngelitA: ¡ Enrique Enrique mío! ¿Cómo estás?
Enrique: Déjame Angelito, no quiero ver a nadie, no merezco nada... nada.
AngelitA: Enrique : Pero yo no pude, estuve a punto de decirle a Com otú lo m ucho que lo sentía y la
vergüenza m e ganó.
AngelitA: ¿Por qué lo dices? ¿Estuvo Comotú contigo?
Enrique: Si, y no tuve el corajede pedirle perdón. Y para todo esto Comotú me prestó su cartuchera con todas sus cosas.
Ahora ¿ves cómo me siento?
AngelitA: Muy arrepentido, pero sabes una cosa, amigo mío, Dios que lo ve todo sabe como te comportas y se pone muy
triste cuando haces cosas malas. Recuerda que el pecado te separa de Dios.
Enrique: Entonces, ¿qué debo hacer?
AngelitA: Pedirle al Señor Jesús que te perdone por todas las cosas malas que hiciste, que limpie tu corazón y que te
ayude a no hacerlas más.
Enrique : ¿Y cómo hago para pedirle perdón al Señor Jesús?
AngelitA: Simplemente haciendo estaoración conmigo y si ustedes quieren chicos repítanla con nosotros. Cerramos los
ojos y agachamos la cabeza.
Oración: Señor Jesús te quiero pedir que me limpies todas las cosas malas que hay en mi corazón y ayúdame, Señor, a
no hacerlas más. Gracias porque un día moriste por cada uno de nosotros en la cruz para salvarnos del pecado. En el
Nombre de Jesús. Amén.
Enrique: ¡Qué bien que me siento, Angelito! ¡Hay un alivio dentro mío, como si me hubieran quitado una carga!
Angelito: Sabes ¿por qué?Porque Cristo vino a vivir a tu corazón para no irse nunca y limpiar todo el pecado que había
en ti. ¿Te animás Chascoverto a pedirle perdón a Comotú por lo que le hiciste?
Enrique: ¡Por supuesto!, ahora que tengo a Jesús, soy capaz de todo, hasta le pediría perdón al perro de la esquina po r
haberle pegado una patada en la cara.
Angelito: Mirá que sos tremendo, muy bien entonces vamos.
Enrique ¡Vamos! ¡Chau chicos!
Se retiran del escenario. Que el Maestro termine con el texto de Romanos 6:23
Porque la paga del pecado es muerte,más la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro
FIN