La Justicia Federal no le hizo lugar a medida del Intendente de La Rioja cont...
Los mareños y la nueva invasión
1. Los Mareños y la
Nueva Invasión
Por: Carlos Beas Torres
Los huaves o mareños como les conocemos los fuereños, o ikojt`s, ikoots o jonatz como
se llaman así mismos, son los habitantes de pequeños pueblos indígenas asentados
alrededor del sistema lagunar del Istmo de Tehuantepec. Sus casi 20,000 integrantes
habitan una decena de comunidades, siendo la más tradicional San Mateo cercana al
puerto industrial petrolero de Salina Cruz; la más amenazada San Dionisio y la más
aculturizada San Francisco del Mar donde predominan las costumbres zapotecas y
occidentales y donde la lengua materna casi ha desaparecido.
En su larga historia, los mareños han enfrentado graves peligros para la existencia misma
de su pueblo. De antiguo las invasiones zapotecas y aztecas les despojaron de sus
mejores tierras y los arrinconaron a una franja de terreno yermo y arenoso a orillas del
Golfo de Tehuantepec; años después sufrieron los embates de los conquistadores
españoles; quienes los sometieron y mantuvieron sujetos como sus vasallos. Durante
siglos vivieron en un estado de aislamiento casi total lo que les permitió mantener vivas
muchas de sus costumbres y creencias.
En años recientes la expansión de las grandes empresas ha provocado graves daños
ambientales y afectado de manera directa el patrimonio de los mareños, quienes
tradicionalmente se han dedicado a obtener su alimento de la pesca, misma que obtienen
de las lagunas ubicadas en su territorio. Las mujeres de esta nación indígena se han
dedicado al bordado de finos textiles y al pequeño comercio de peces y camarones.
La construcción de la refinería de Pemex y del puerto de carga de buques petroleros en
Salina Cruz les trajo una grave contaminación por metales pesados y al modificarse las
corrientes marinas se ocasiono el cierre de las barras, lo cual ha provocado la lenta
agonía de las lagunas y con ello la pérdida de la fauna y flora, agudizando con ello la ya
de por si crónica pobreza de los mareños.
Acorralados y sometidos, los mareños mantuvieron una feroz resistencia para defender su
territorio y su cultura ancestral, muestra de ello son su danzas y música consideradas
como una de las expresiones más puras de las artes prehispánicas. Las danzas de La
Tortuga y El Sapo y la serpiente son interpretadas con instrumentos precolombinos.
Los pueblos mareños han mantenido durante largos años graves disputas con sus
vecinos zapotecas, quienes les han despojado de tierras y han practicado un intercambio
comercial abusivo. El conflicto agrario entre las comunidades de San Francisco del Mar y
la zapoteca de San Francisco Ixhuatán ha sido considerado como uno de los más graves
en nuestro país pues están en disputa cerca de 20,000 hectáreas y a largo de los años se
han suscitado numerosos enfrentamientos violentos que han dejado un elevado saldo de
muertos y heridos.
2. Por su parte San Dionisio del Mar se ha confrontado en diferentes ocasiones con sus
vecinos zapotecas de Unión Hidalgo con quiénes disputa tierras y San Mateo del Mar ha
mantenido un diferendo desde hace 60 años con los zapotecas de Huilotepec y sus
hermanos mareños de Santa María del Mar, única comunidad ikojts sujeta a un municipio
zapoteca.
También en el pasado reciente, la resistencia mareña se ha expresado en contra de
megaproyectos. Hace ya varios años una grúa propiedad de la trasnacional mexicana ICA
amaneció quemada, ello cancelo el proyecto de construir un canal intercostero que
afectaría al sistema lagunar. Algunos paisanos de San Francisco atribuyeron el incidente
a los monteoc, divinidades rayo que protegen los mares huaves, otros a las manos de los
pescadores que veían amenazada su forma de vida. Poco tiempo después se activó de
nuevo la resistencia mareña en contra de un ambicioso megaproyecto trasnacional que
pretendía apoderarse del sistema lagunar para construir decenas de granjas industriales
de camarón; en esta lucha jugó un papel fundamental Radio Huave la cual alerto a los
pescadores ikojts de los daños que sufrirían con ese proyecto, entonces la gente se
movilizó y expulso a los invasores y el megaproyecto se cayó estrepitosamente.
En tiempos recientes ha sido creciente la presencia en la región de empresas extranjeras
que tratan de imponer a toda costa sus proyectos eólicos, ello ha generado graves
conflictos al interior de los pueblos mareños, o ha agudizado las viejas disputas agrarias.
En San Dionisio del Mar los comuneros inconformes se han movilizado desde hace más
de medio año en contra de la autorización que diera el cuestionado Presidente Municipal
Miguel López Castellanos para la construcción del parque eólico San Dionisio por parte de
la empresa Mareña Renovables. En protesta la comunidad de San Dionisio decidió en
Enero del 2012 ocupar el palacio municipal, suspender clases y bloquear los accesos a la
comunidad .El proyecto de construcción de 30 aerogeneradores en tierras que se disputan
desde antaño los pueblos de San Mateo y Santa María también ha provocado una grave
confrontación, que ya ha ocasionado que los últimos tres años este bloqueado el acceso
terrestre a Santa María y también la destitución del presidente municipal que otorgo
también permisos a la empresa eólica, a espaldas de su pueblo.
Hace unos días en el marco de una intensa campaña mediática promovida por la empresa
Mareña Renovables, los ejecutivos desconocían de manera cínica la responsabilidad que
tienen en el grave conflicto que desgarra a la comunidad de San Dionisio y se deslindan
de la confrontación que enfrentan los pueblos de San Mateo y Santa María. La
irresponsabilidad social de las empresas es parte del negocio trasnacional que se disputa
el mercado global de las llamadas energías limpias. El dinero verde se esta manchando
de sangre de nuestras gentes.