2. Machu Picchu, Perú
A 130 kilómetros de Cuzco, la Ciudad Perdida de los incas se alza entre
barrancos en mitad de un paraje inaccesible de los Andes peruanos. La
perfección de sus construcciones, su conservación y su escenario natural,
encajonado en la cresta de un cerro sobre el valle del río Urubamba, hacen
de este yacimiento uno de los tesoros arqueológicos más valiosos del
mundo y, desde luego, uno de los más místicos.
3. Mezquita Sheikh Zayed, Abu Dhabi,
Emiratos Árabes Unidos
Célebre por su color blanco puro y la fusión de las diferentes arquitecturas
islámicas en un solo templo, este inmenso templo con una superficie de
22.412 m2 y capacidad para más de cuarenta mil fieles, está considerada
como la estructura de mármol más grande jamás construida por el
hombre. Abrió sus puertas en el año 2007.
4. Angkor Wat, Siem Reap, Camboya
Más de trescientos templos hinduistas y budistas escondidos en la selva
camboyana y abrazados por las raíces de gigantescos árboles se
mantienen aún en pie en el que fuera corazón del poderoso reino de la
exquisita civilización jemer. Entre ellos el más grandes y también el mejor
conservado de los que integran el asentamiento es el de Angkor Wat.