El documento habla sobre la historia bíblica de Jesús curando a un leproso. Describe las acciones de Jesús al ver y compadecerse del leproso, extender su mano y tocarlo para sanarlo, como una invitación a bendecir en lugar de maldecir. Insta a los lectores a actuar con sentimientos compasivos y misericordiosos, extendiendo manos generosas para curar a otros y darles salud con miradas y contactos cariñosos.

1. BENDECID Y NO MALDIGÁIS. (Mc. 1, 40 -45).
Queridos amigos: Hoy se nos presenta la figura de un leproso, como signo no
sólo de enfermedad, sino también de maldición.
Nada puede haber más inhumano que negar el contacto a las personas para evitar
– decimos – el contagio, la impureza o la contaminación.
¿Reaccionamos con la misma actitud ante aquellos que excluyen a las personas
por sus diferencias legales, culturales, económicas o sociales?
Ninguna actitud de maldición puede ser admitida por los que seguimos al Señor
Para el Señor, todos somos sus hijos. Hoy, nos lo muestra con cuatro acciones
muy significativas ante el leproso:
- “Al oírle y al verle, se conmovió”.
-“Compadecido de él, Jesús extendió su mano y le tocó”.
- Al final, le dijo: “quiero, queda limpio”. (Mc. 1, 41).
Estas acciones del Señor son una invitación a “bendecir y a no maldecir”.
 Bendecir, es “conmoverse” por dentro y por fuera para ver qué se puede hacer.
 Bendecir, es “extender la mano” no para maldecir, maltratar, oprimir, relegar o
defenestrar, sino para acoger y hacer bien, para acariciar y echar una mano.
 Bendecir, es “tocar” con la mano para levantar, para rehacer, para ungir con
acciones de “bien- hacer y de bien- decir”= bendecir.
Celebramos hoy con Manos Unidas su lema:
“La salud, derecho de todos. Actúa”.
 Actuemos, con sentimientos compasivos y misericordiosos.
 Actuemos, con manos benditas que se unen a otras para hacer el bien.
 Actuemos, con acciones curativas que dan salud: miradas tiernas, manos
generosas, pies solícitos, contactos cariñosos y con un corazón sensible y
misericordioso.
¡Bendecid, y no maldigáis – nos dice el Señor!
Gabriel.
6º. Domingo Ordinario. Ciclo. B. Madrid. 12 de Febrero de 2012.