El documento habla sobre varios temas astronómicos como planetas, estrellas, galaxias, nebulosas, agujeros negros, cuásares y pulsares. Define cada uno de estos objetos celestiales y describe sus características principales. Por ejemplo, explica que un planeta es un cuerpo celeste que orbita alrededor del sol, que una estrella es una esfera de plasma que mantiene su forma debido a la gravedad y la presión, y que una galaxia es un conjunto de estrellas, gas y polvo unidos por la gra
2. PLANETA
• Cuerpo sólido de forma esférica, celeste que gira alrededor de una estrella y que se hace visible por la luz que refleja. En
particular los que giran alrededor del Sol.
• Sin embargo, desde hace tiempo esta definición es inadecuada para mucha gente. Los ocho planetas más grandes son
reconocidos como tales, pero había controversia sobre Plutón y otros objetos más pequeños. También merece la pena
recordar que, antes de la invención del telescopio, los "planetas" clásicos eran siete: desde Mercurio a Saturno, excluyendo
a la Tierra, e incluyendo al Sol y la Luna.
• El problema de una definición correcta llegó a un punto crítico en los años 2000. Sin embargo, ésta no es la primera vez que
se identifica un sistema de este tipo. En el 2004, Gael Chauvin descubrió un objeto de unas 5 veces la masa de Júpiter
orbitando alrededor de la enana marrón 2M1207. La distancia proyectada es de unas 55 unidades astronómicas.
• La Unión Astronómica Internacional, organismo responsable de resolver los asuntos de la nomenclatura astronómica, se
reunió en agosto de 2006 dentro de su XXVI Asamblea General en Praga. Aquí, tras largas discusiones y varias
propuestas, se adoptó finalmente que un planeta es:
• Un cuerpo celeste que (a) gira alrededor del Sol, (b) tiene suficiente masa para que su gravedad supere las fuerzas del
cuerpo rígido, de manera que asuma una forma de equilibrio hidrostático, de forma esférica, y (c) que haya despejado la
zona de su órbita.
• Además, propone el término planeta enano para los cuerpos que cumplan las condiciones (a) y (b), pero no (c) y no sean
satélites. Éste es el caso de Plutón, Ceres y Eris (conocido antes como 2003 UB313). Con posterioridad también se han
añadido a la lista de planetas enanos Makemake y Haumea. Por último, el resto de los objetos del Sistema Solar, excepto
los satélites, pueden considerarse cuerpos menores del Sistema Solar.
4. ESTRELLA
• En sentido general, una estrella es todo objeto astronómico que brilla con luz propia;
mientras que en términos más técnicos y precisos podría decirse que se trata de una
esfera de plasma que mantiene su forma gracias a un equilibrio hidrostático de fuerzas.
El equilibrio se produce esencialmente entre la fuerza de gravedad, que empuja la
materia hacia el centro de la estrella, y la presión que ejerce el plasma hacia fuera, que,
tal como sucede en un gas, tiende a expandirlo. La presión hacia fuera depende de la
temperatura, que en un caso típico como el del Sol se mantiene con la energía producida
en el interior de la estrella. Este equilibrio seguirá esencialmente igual en la medida de
que la estrella mantenga el mismo ritmo de producción energética. Sin embargo, como se
explica más adelante, este ritmo cambia a lo largo del tiempo, generando variaciones en
las propiedades físicas globales del astro que constituyen la evolución de la estrella.
6. GALAXIA
• Una galaxia es un conjunto de varias estrellas, nubes de gas, planetas, polvo cósmico, materia oscura y quizá energía
oscura, unido gravitatoriamente. La cantidad de estrellas que forman una galaxia es incontable, desde las enanas, con 107,
hasta las gigantes, con 1012 estrellas (según datos de la NASA del último trimestre de 2009). Formando parte de una
galaxia existen subestructuras como las nebulosas, los cúmulos estelares y los sistemas estelares múltiples.
• Históricamente, las galaxias han sido clasificadas de acuerdo a su forma aparente (morfología visual, como se la suele
nombrar). Una forma común es la de galaxia elíptica que, como lo indica su nombre, tiene el perfil luminoso de una elipse.
Las galaxias espirales tienen forma circular pero con estructura de brazos curvos envueltos en polvo. Galaxias inusuales se
llaman galaxias irregulares y son, típicamente, el resultado de perturbaciones provocadas por la atracción gravitacional de
galaxias vecinas. Estas interacciones entre galaxias vecinas, que pueden provocar la fusión de galaxias, pueden inducir el
intenso nacimiento de estrellas. Finalmente, tenemos las galaxias pequeñas, que carecen de una estructura coherente y
también se las llama galaxias irregulares.
• Se estima que existen más de cien mil millones (100.000.000.000) de galaxias en el universo observable. La mayoría de las
galaxias tienen un diámetro entre cien y cien mil parsecs y están usualmente separadas por distancias del orden de un
millón de parsecs. El espacio intergaláctico está compuesto por un tenue gas cuya densidad media no supera un átomo por
metro cúbico. La mayoría de las galaxias están dispuestas en una jerarquía de agregados, llamados cúmulos, que a su vez
pueden formar agregados más grandes, llamados supercúmulos. Estas estructuras mayores están dispuestas en hojas o en
filamentos rodeados de inmensas zonas de vacío en el universo.
• Se especula que la materia oscura constituye el 90 % de la masa en la mayoría de las galaxias. Sin embargo, la naturaleza
de este componente no está demostrada, y de momento aparece sólo como un recurso teórico para sustentar la estabilidad
observada en las galaxias. La materia oscura fue propuesta inicialmente en 1933 por el astrónomo suizo Fritz Zwicky, pues
la rotación observada en las galaxias indicaba la presencia de una gran cantidad de materia que no emitía luz.
8. NEBULOSA
• Las nebulosas son regiones del medio interestelar constituidas por gases (principalmente
hidrógeno y helio) y elementos químicos en forma de polvo cósmico. Tienen una importancia
cosmológica notable porque muchas de ellas son los lugares donde nacen las estrellas por
fenómenos de condensación y agregación de la materia; en otras ocasiones se trata de los
restos de estrellas ya extintas o en extinción.
• Las nebulosas asociadas con estrellas jóvenes se localizan en los discos de las galaxias
espirales y en cualquier zona de las galaxias irregulares, pero no se suelen encontrar en
galaxias elípticas puesto que éstas apenas poseen fenómenos de formación estelar y están
dominadas por estrellas muy viejas. El caso extremo de una galaxia en la que muchas
nebulosas presentan intensos episodios de formación estelar se denomina galaxia starburst.
• Antes de la invención del telescopio, el término «nebulosa» se aplicaba a todos los objetos
celestes de apariencia difusa. Por esta razón, a veces las galaxias (conjunto de miles de
millones de estrellas, gas y polvo unidos por la gravedad) son llamadas indebidamente
nebulosas; se trata de una herencia de la astronomía del siglo XIX que ha dejado su signo en
el lenguaje astronómico contemporáneo.
• Las nebulosas se pueden clasificar en tres grandes categorías según la naturaleza de su
emisión (o falta de ella):
10. HOYO NEGRO
• Un agujero negro1 u hoyo negro2 es una región finita del espacio en cuyo interior existe una concentración
de masa lo suficientemente elevada para generar un campo gravitatorio tal que ninguna partícula material,
ni siquiera la luz, puede escapar de ella. Sin embargo, los agujeros negros pueden ser capaces de emitir
radiación, lo cual fue conjeturado por Stephen Hawking en los años 1970. La radiación emitida por agujeros
negros como Cygnus X-1 no procede sin embargo del propio agujero negro sino de su disco de acreción.3
• La gravedad de un agujero negro, o «curvatura del espacio-tiempo», provoca una singularidad envuelta por
una superficie cerrada, llamada horizonte de sucesos. Esto es previsto por las ecuaciones de campo de
Einstein. El horizonte de sucesos separa la región del agujero negro del resto del universo y es la superficie
límite del espacio a partir de la cual ninguna partícula puede salir, incluyendo los fotones. Dicha curvatura
es estudiada por la relatividad general, la que predijo la existencia de los agujeros negros y fue su primer
indicio. En los años 70, Hawking, Ellis y Penrose demostraron varios teoremas importantes sobre la
ocurrencia y geometría de los agujeros negros.4 Previamente, en 1963, Roy Kerr había demostrado que en
un espacio-tiempo de cuatro dimensiones todos los agujeros negros debían tener una geometría cuasi-
esférica determinada por tres parámetros: su masa M, su carga eléctrica total e y su momento angular L.
• Se conjetura que en el centro de la mayoría de las galaxias, entre ellas la Vía Láctea, hay agujeros negros
supermasivos.5 La existencia de agujeros negros está apoyada en observaciones astronómicas, en
especial a través de la emisión de rayos X por estrellas binarias y galaxias
12. CUÁSAR
• Un cuásar1 o quasar (acrónimo en inglés de quasi-stellar radio source) es una fuente
astronómica de energía electromagnética, que incluye radiofrecuencias y luz visible.
• En 2007, el consenso científico dijo que estos objetos están extremadamente lejos, lo
que explicaría su alto grado de corrimiento al rojo, son extremadamente luminosos,
permitiendo su visión a pesar de su distancia, y muy compactos, que sería la causa de
los cambios rápidos en la magnitud de brillo. Se cree que son núcleos activos de galaxias
jóvenes en formación.
• Los cuásares visibles muestran un desplazamiento al rojo muy alto. El consenso
científico dice que esto es un efecto de la expansión métrica del universo entre los
quasares y la Tierra. Combinando esto con la Ley de Hubble se sabe que los quasares
están muy distantes. Para ser observables a esas distancias, la energía de emisión de
los quasares hace empequeñecer a casi todos los fenómenos astrofísicos conocidos en
el universo, exceptuando comparativamente a eventos de duración breve como
supernovas y brotes de rayos gamma. Los cuásares pueden fácilmente liberar energía a
niveles iguales que la combinación de cientos de galaxias medianas. La luz producida
sería equivalente a la de un billón de soles.
14. PULSAR
• Un púlsar es una estrella de neutrones que emite radiación periódica. Los púlsares poseen un
intenso campo magnético que induce la emisión de estos pulsos de radiación electromagnética
a intervalos regulares relacionados con el periodo de rotación del objeto.
• Las estrellas de neutrones pueden girar sobre sí mismas hasta varios cientos de veces por
segundo; un punto de su superficie puede estar moviéndose a velocidades de hasta 70.000
km/s. De hecho, las estrellas de neutrones que giran tan rápidamente se expanden en su
ecuador debido a esta velocidad vertiginosa. Esto también implica que estas estrellas tengan
un tamaño de unos pocos miles de metros, entre 10 y 20 kilómetros, ya que la fuerza
centrífuga generada a esta velocidad es enorme y sólo el potente campo gravitatorio de una de
estas estrellas (dada su enorme densidad) es capaz de evitar que se despedace.1 2
• El efecto combinado de la enorme densidad de estas estrellas con su intensísimo campo
magnético (generado por los protones y electrones de la superficie girando alrededor del centro
a semejantes velocidades) causa que las partículas que se acercan a la estrella desde el
exterior (como, por ejemplo, moléculas de gas o polvo interestelar), se aceleren a velocidades
extremas y realicen espirales cerradísimas hacia los polos magnéticos de la estrella. Por ello,
los polos magnéticos de una estrella de neutrones son lugares de actividad muy intensa.
Emiten chorros de radiación en el rango del radio, rayos X o rayos gamma, como si fueran
cañones de radiación electromagnética muy intensa y muy colimada.