El documento argumenta que Jesús no es la puerta al cielo, sino el Mesías, y que el nombre "Jesús" fue un invento de la Iglesia Católica en Roma. Afirma que la profecía de Isaías 7:14 se refiere a "Imanuel", no a "Jesús", y que la cristiandad ha bebido del "vino de fornicación" de Roma al llamar al Maestro por el nombre de "Jesús". También sostiene que aunque vivimos bajo gracia, debemos cumplir todos los mandam
Religion la resucitacion de Jesus y la vida de una mariposa.pdf
El mesías es la puerta al cielo
1. El Mesías sí es la puerta al cielo. Jesúcristo no. Si uds. dicen Cristo
por cuestión de traducción del hebreo Mashiaj al griego Christós
que a su vez deriva en Cristo: está bien, porque es la traducción al
griego del idioma hebreo. Pero, jesús es un invento católico, hecho
en Roma. Eso es parte del vino de fornicación,
Que le dio a beber la bestia romana católica a todo el mundo, y
lamentablemente y es muy dolorso que hasta la actualidad, en estos
postreros tiempos en que estamos viviendo: la cristiandad ha
bebido y está bebiendo de ese vino de fornicación, adulterando así
la palabra de Dios, llamando al Maestro por un nombre (jesús) que
proféticamente el Señor no dio. Mieren lo que la profecía dice en
Isaías 7:14: Imanuel, que es un acrónimo cuyo significado es: con
nosotros Dios. Y esta palabra profética del Señor dada a través de
su angel en Iasías, es dada nuevamente en S.Mateo.1:23 donde
vuelve a decir el angel: Imanuel. Concordando y cumpliéndose así
la profecía antes dicha en Isaías; no así el verso de S.Mt. 1:21 el
cual es parte del vino de fornicación que dio de beber Roma a las
naciones, del cual ha bebido la crisitiandad. ¡Misericordia Señor!
Es cierto que vivimos bajo la gracia, la cual es un don inmerecido
de Dios para nosotros que ésta a su vez es la ley Sal,119:29. Por lo
tanto, con mayor razón, debemos cumplir los mandamientos
(todos) como nos dijo el Maestro en S.Mt 19:17 para poder entrar
en la vida (la vida eterna). Por consiguiente: la gracia no quita la
circunisión ni ningún otro mandamiento dado por el Señor para
nosotros (su pueblo) porque él nos lo dejo bien dicho que él no
vino a abrogar la ley ni los profetas que son la gracia de Dios.
S.Mt.5:17,18 continúa la ley ya que es para siempre como él lo
expresó en estos versos dados anteriormente. Y este legado santo
De guardar la ley los mandamientos que es su gracia: el Maestro lo
transmitió a sus díscipulos como vemos en 1 de Co.1:19, Stg. 2:10,
Ap.14:12. Ya que así es como anduvó nuestro Maestro, guardando
la ley los mandamientos que es la gracia de Dios, para que
nosotros anduviéramos como él. 1 de Juan.2:6.