Estela se encuentra en la ciudad italiana de Altamura para encontrar el antídoto que le permita perder sus poderes mágicos. Iván le explica que debe encontrar el agujero de donde proviene la piedra que tropezó, la cual fue traída de Altamura por los romanos. Estela busca por la ciudad y finalmente encuentra el agujero en las murallas cerca de la Puerta Matera, donde su piedra flota hasta el agujero y ella pierde sus poderes. Iván aparece renovado y le concede su deseo de regresar
1. A Altamura, pero ¿Dónde está? "preguntó asombrada Estela.
-En Italia – contestó a Iván.
– Y ¿qué es?
-Es una ciudad de la Puglia-dijo Iván.
- Pero ¿por qué debo ir allí? "continuó Estela
-La piedra con la que te has tropezado-Iván explicó-es una piedra de la ciudad de
Altamura, que fue traída a España por los romanos, cuando destruyeron la ciudad. Tu
tarea ahora es encontrar el lugar de donde se extrajo: aquí puedes encontrar el medio
o el agujero en el que resolverlo. Sólo de esta manera encontraras el antídoto que te
permitirá eliminar tus poderes. Sin embargo debes tener cuidado para no perder la
piedra que tienes contigo y no a hacer lo contrario caerá en muchos pedazos por lo
que luego va a ser difícil encontrar el lugar que buscas.
Ah!! Se me olvidaba, tienes tiempo hasta el amanecer, después de este tiempo no
podrás perder tus poderes.
- Pero ¿cómo voy a ir a Altamura en tan poco tiempo? ¡No podré hacerlo!-repitió la
Estela a sí misma.
El Metropol Parasol había cansado a Estela, hasta tal grado que en cuanto llegó a casa
se quedó dormida.
En un momento dado, Estela se despertó con un extraño rugido-BOUM, BOUM !!!!
-¿Pero qué está pasando? – pensó Estela asustada. Entonces abrió los ojos y se
encontró en una ciudad con un gran objetivo.
- ¿Pero dónde estoy? ", dijo Estela. Se quedó parada en el suelo y vio el mapa de una
ciudad. Estaba escrito ALTAMURA. – ¡Estoy en Altamura! Continuó mirando el mapa y
vio un punto que buscaba hacia el Puerto de BARI.
La ciudad estaba rodeada de muros por lo que no pudo entrar.
Fue 1799 que en la ciudad había una revuelta entre los habitantes y las fuerzas de
cardenal Ruffo. El Cardenal Ruffo había sido enviado a Moscú por el rey de Nápoles.
Estela con sus poderes entró en la ciudad a través de los muros. Era casi medianoche y
con el mapa comenzó su investigación en la ciudad.
Desde el Puerto de Bari, Estela caminó por el corso de FEDERICIO II de Suabia y se
encontró con una plaza, "PIAZZA DELLA REPUBLICA", miró a la derecha y vio un
escudo en el suelo: era el escudo de la ciudad que los habitantes habían dedicado a
Federico II por haber reconstruido la ciudad después de que fue destruida por los
romanos. En el escudo faltaban pequeñas piedras, Estela trató de colocar su piedra,
pero no coincidió y el escudo de armas comenzó a flotar.
La niña comenzó a preocuparse porque el tiempo pasaba y continuaba teniendo
poderes mágicos. Continuó su camino y, siguiendo el plano, se encontró en el
“CLAUSTRO de la Traición”. En aquel cuando estaba el Cardenal Ruffo. El Cardenal
había logrado entrar en la ciudad, engañando, con una estratagema, un pobre Señor
altamurano. El Señor fue engañado con propia trampa y lo hizo salir de su sótano.
2. Allí también había una piedra, Estela intentó unirla a ella, pero la piedra comenzó a
flotar.
Era casi de madrugada y Estela había fallado otra vez en encontrar el antídoto.
Levantó a la mirada y fue atraída por una gran nube de humo que invadió la ciudad.
Comenzó a toser, pero continuó la búsqueda y se encontró cerca de Puerta MATERA.
Las paredes de la ciudad fueron alcanzadas por una bala de cañón que había creado un
agujero en las paredes.
Estela miró antes el agujero, entonces contempló la piedra que comenzó a flotar hasta
el agujero. Llegó allí, ella ya no estaba encantada.
De ese agujero salieron mil rayos de luz y tantas estrellas que iluminaron la ciudad.
De esas estrellas vino Iván. Estaba vestido de amarillo, no tenía barba ni bigote. El
hombre se quitó la chaqueta y dijo: "Felicidades, has logrado tu misión, no sólo
encontrar el lugar misterioso y colocar la piedra en su lugar sino que también me has
hecho más feliz, más sexy y más joven.
-Ahora-continuó Iván-puedes pedir un último su deseo.
-Me gustaría volver a España, a mi casa. Hoy es mi cumpleaños y me gustaría
celebrarlo con mis amigos.
Iván dijo-ahora soy feliz, cierra los ojos, ¡este es mi regalo!
Estela feliz, abrió los ojos y se encontró en su cama... tuvo un sueño de aventuras
donde había perdido sus poderes.
FINAL
Alumnos de 2 ^ G