5. LOS HUESOS
El hueso es un tejido firme, duro y resistente que forma parte del endoesqueleto de
los vertebrados. Está compuesto por tejidos duros y blandos. El principal tejido duro
es el tejido óseo, un tipo especializado de tejido conectivo constituido por células
(osteocitos) y componentes extracelulares calcificados. Hay 206 huesos en el cuerpo
humano. Los huesos poseen una cubierta superficial de tejido conectivo fibroso
llamado periostio y en sus superficies articulares están cubiertos por tejido conectivo
cartílaginoso. Los componentes blandos incluyen a los tejidos conectivos mieloide
tejido hematopoyético y adiposo (grasa) la médula ósea. El hueso también cuenta
con vasos y nervios que, respectivamente irrigan e inervan su estructura.
Los huesos poseen formas muy variadas y cumplen varias funciones. Con una
estructura interna compleja pero muy funcional que determina su morfología, los
huesos son livianos aunque muy resistentes y duros.
El conjunto total y organizado de las piezas óseas (huesos) conforma el esqueleto o
sistema esquelético. Cada pieza cumple una función en particular y de conjunto en
relación con las piezas próximas a las que está articulada.
Los huesos en el ser humano son órganos tan vitales como los músculos o el
cerebro, con una amplia capacidad de regeneración y reconstitución. Sin
embargo, vulgarmente se tiene una visión del hueso como una estructura
inerte, puesto que lo que generalmente queda a la vista son las piezas óseas —secas
y libres de materia orgánica— de los esqueletos tras la descomposición de los
cadáveres.
7. LOS MUSCULOS
Un músculo es un tejido blando que se encuentra en la
mayoría de los animales. Generan movimiento al
contraerse o extendiéndose al relajarse. En el cuerpo
humano (y en todos los vertebrados) los músculos están
unidos al esqueleto
por medio de los tendones, siendo así los responsables
de la ejecución del movimiento corporal.
La propiedad de contraerse, esto es, de poder acortar su
longitud como efecto de la estimulación por parte de
impulsos nerviosos provenientes del sistema nervioso, se
la debe al tejido muscular que los forman, más
precisamente al tejido muscular de tipo estriado
esquelético.
9. ¿Cómo FUNCIONA NUESTRO
CUERPO?
La forma de pararnos, de caminar, sentarnos dice mucho de
nosotros, nos delata mucho de nuestra personalidad.
Es interesante tener consciencia de que muchas veces ayudar a
corregir costumbres de malas posturas significa no solo un trabajo
corporal sino también de conductas ante la vida misma.
Los músculos de todo nuestro cuerpo delatan como nos hemos
comportado con nuestro cuerpo desde nuestra niñez.
La gimnasia, una impactante forma de domesticar nuestro cuerpo.
Debemos de tener en cuenta también que el trabajo debe de ser
para la persona no en contra de ella o de su naturaleza.
Estamos compuestos por dos hemicuerpos unidos por la columna
vertebral además de que cada hemicuerpo forma una cadena de
músculos desde los dedos de los pies hasta los músculos faciales.