El documento argumenta que los valores humanos deben practicarse diariamente en lugar de simplemente enunciarse. Propone que la familia, escuelas, oficinas y otros lugares deben albergar proyectos positivos que sirvan a los demás y abran grandes esperanzas para las nuevas generaciones. A continuación, enumera una lista de valores humanos y actitudes positivas como la servicialidad, el compañerismo, la honestidad y la responsabilidad social.