Las transnacionales shell y goldman sachs premio a peores empresas
1. Las transnacionales Shell y Goldman Sachs, premio a la
vergüenza 2013
Fuente: Derecho sin Fronteras. Viernes 25 de enero de 2013
La sociedad bancaria estadounidense Goldman Sachs y la
multinacional anglo-holandesa Shell recibieron este 24 de
enero el “Premio a la Vergüenza”, concedido por las
organizaciones suizas “Declaración de Berna” y “Greenpeace”,
en paralelo al Foro Económico Mundial de Davos.
Al entregar este jueves el premio “Public Eye Awards” a las peores
empresas del año, las dos ONG helvéticas denunciaron en la misma
ciudad de Davos, “las agresiones contra los derechos humanos y los
crímenes ambientales particularmente graves cometidos por las
empresas irresponsables”.
Hambrear al pueblo griego
La Goldman Sachs, que se alzó con la presea otorgada por el jurado,
“es un actor central de la mundialización, guiada por las finanzas, que
alimenta los beneficios…, acrecentando las desigualdades
fenomenales y la pobreza creciente de amplios sectores de la
población”. La argumentación enfatiza que “los productos derivados
de Goldman Sachs que permitieron a Grecia integrarse en la zona del
euro de forma fraudulenta hipotecaron el futuro del pueblo griego”.
El jurado del “Ojo Público sobre Davos” estuvo integrado en esta
edición 2013, por Cécile Bühlman, ex-diputada nacional y presidenta
del Consejo de Fundación de Greenpeace/Suiza; el profesor Kumi
Naidoo, ex-secretario general de “Llamado Global a la Acción contra
la Pobreza” (Global Call to Action Against Poverty); Andreas
Missbach, responsable del sector bancos y plaza financiera de la
Declaración de Berna así como los profesores especializados en ética
económica de prestigiosas universidades europeas: Andreas Cassee,
Hans Ruh, Ulrich Thielemann, Klaus Peter Rippe y Guido Palazzo.
La Shell destruye el Ártico
2. Por su parte, el premio del público, resultado del voto por Internet de
41.800 personas de todo el mundo, fue atribuido en esta edición a la
trasnacional petrolera Shell, acusada de estar en la “primera línea de
la búsqueda altamente riesgosa de materiales fósiles en la zona
particularmente sensible del Ártico”.
El descubrimiento de estos nuevos hidrocarburos, subrayan los
promotores del premio, “fue posible debido al cambio climático y más
precisamente a la disminución de la capa glaciar ártica, a la que Shell
contribuye con su explotación. Cada proyecto petrolero de esta
naturaleza, insisten, es sinónimo de emisión masiva de CO2.
Según estimaciones de especialistas, las reservas petroleras del
Ártico, de continuarse a este ritmo, se agotarían en solo 3 años.
Agrediendo “uno de los últimos paraísos naturales de la tierra y
amenazando en forma directa a 4 millones de personas y una fauna
única”, insisten.
Las dos multinacionales premiadas, hacían parte de seis candidatas.
La lista la completaba el grupo energético suizo Repower; la empresa
francesa de transporte y energía Alstom; la multinacional de
seguridad privada británica G4S y la sudafricana Lonmin, la número
tres en la industria minera y del sector del platino en particular,
involucrada en la masacre de 44 trabajadores de la mina Marikana.
Correos de protesta al Gobierno suizo
En esta edición 2013 el premio del “Ojo Público sobre Davos”,
adquiere una particular importancia. Ya que se inscribe en el marco
de una iniciativa más amplia impulsada por un medio centenar de
organizaciones suizas de desarrollo, de ecología y solidaridad.
La Campaña “Derecho sin Fronteras” exige a las autoridades
nacionales definir normas legales que obliguen a las empresas suizas
aplicar en el extranjero –especialmente en el Sur y el Este- las
mismas normas éticas y ambientales que deben respetar en la
Confederación Helvética.
Horas antes de la entrega del premio a la vergüenza, varios
militantes de la Campaña “Derecho sin Fronteras” se movilizaron
hacia Davos, utilizando métodos innovadores de denuncia. Entre ellos
un enorme afiche con la figura del ministro de economía nacional
Johann Schneider Ammann.
Los promotores de la campaña relanzaron la acción que se extenderá
durante una semana a través de un mensaje electrónico estándar
dirigido a las autoridades nacionales. Solicitando que den una
respuesta a la petición ciudadana presentada en junio pasado,
firmada por 135 mil personas, y que exigía reglas obligatorias para
que las multinacionales helvéticas respeten los derechos humanos y
3. ambientales en el sur. En solo 24 horas el Gobierno suizo recibió
7.273 mil correos electrónicos de protesta.
Sergio Ferrari, en colaboración con E-CHANGER, ONG suiza de
cooperación solidaria, promotora de la Campaña “Derecho sin
Fronteras”.