Barack Obama utilizó exitosamente las redes sociales como Facebook, YouTube y Twitter para ganar las elecciones presidenciales de 2008 en Estados Unidos, superando a su oponente John McCain. Obama tenía millones de seguidores en estas plataformas que usaba para compartir actualizaciones sobre sus políticas y campaña. Las redes sociales le permitieron conectarse directamente con los votantes estadounidenses, especialmente los jóvenes, y jugar un papel clave en su victoria.