2. Puente del Río Duero
• Partimos de Peñafiel y nos dirigimos a
Pesquera de Duero por la carretera VA-101.
• A las salida de Peñafiel cruzamos el puente
sobre el río Duero, muy cerca de la
desembocadura del río Duratón.
• Al lado del actual puente, por el que cruza la
carretera el río Duero, está el antiguo puente
romano de piedra.
4. Dirección al Valle
●
Dirección Pesquera de Duero, giramos a la
derecha y tomamos la carretera VP3017,
dirección Valdearcos de la Vega y San LLorente.
●
También podemos ir por el Camino Natural
Senda del Duero, caminando por su margen
derecho hasta Bocos de Duero
6. • Si vamos por la carretera VP3017, a 8
kilómetros encontraremos el pueblo de Curiel
Duero. Hay que desviarse a la izquierda en
una curva pronunciada y peligrosa.
11. Curiel de Duero
• Si continuamos por la carretera VA-VP3017,
llegaremos en coche a Bocos de Duero,
pequeña aldea, de la que destacamos su
recogida iglesia parroquial.
13. Valdearcos de la Vega
• Al llegar a este pueblo se nos presentan dos
posibilidades:
• Desviarnos a la derecha con dirección a Roa y
Aranda de Duero de la Provincia de Burgos
por la carretera VA-134 y continuar por la BU-
134
• Mantenernos en la VA-VP3017 para seguir
ascendiendo por el Valle del Cuco.
17. Corrales de Duero
• A 5 kilómetros de Valdearcos encontramos el
pueblecito de Corrales de Duero, cuyo
nombre nos puede indicar una ancestral
dedicación de sus habitantes al pastoreo del
ganado de las cada vez más escarpadas
laderas de este valle.
20. San LLorente
• Ya estamos llegando al final del valle.
• Tras un curioso puente de acceso desde la
carretera, que asemeja el paso de un foso
circundante a un castillo, ascendemos por
empinadas calles al imponente mole de su
iglesia gótica del Siglo XVI.
23. Agradecemos a todos los colaboradores de Wikipedia, que nos ha servido de principal fuente de este trabajo experimental
24. El Páramo
• Saliendo de San Llorente estamos casi a 900
metros de altitud.
• La altitud y la llanura dibujan un paisaje muy
particular e inolvidable si se pasea por él en
invierno, cuando es arrasado por el frio viento
del norte, aquí llamado “Cerrato”.