2. Brasil dispone de abundantes recursos naturales y su economía está relativamente
diversificada.
Si observamos la tabla que obtuvimos del Banco Mundial, podremos ver que la
industria y los SERVICIOS sobre todo se han convertido en una importante
actividad para el PIB
Repartición de la
actividad económica
por sector
Agricultura Industria Servicios
Empleo por sector (en
% del empleo total)
14,5 22,9 76,6
Valor añadido (en %
del PIB)
5,6 23,4 71,0
Valor
añadido (crecimiento
anual en %)
0,4 -1,8 1,0
3. 1. Gran potencia agrícola, Brasil es el primer productor mundial de café, caña de
azúcar, naranjas, y uno de los primeros productores de soja. El país atrae a un
gran número de empresas multinacionales de la industria agroalimentaria y los
biocarburantes.
2. Brasil cuenta con el mayor volumen de ganado comercial del mundo.
3. Aún así, el aporte de la agricultura al PIB es relativamente escaso: representa
únicamente 5,5%, aunque este sector asegura el 40% de las exportaciones. Los
bosques cubren la mitad del territorio nacional, teniendo la mayor selva
ombrófila del mundo, en la cuenca del Amazonas. Brasil es el cuarto exportador
mundial de madera.
4. Se trata también de un gran país industrial. La explotación de su riqueza en
minerales le coloca como segundo exportador mundial de hierro y uno de los
principales productores de aluminio y hulla.
5. n cuanto país productor de petróleo, Brasil se propone autoabastecerse a corto
plazo (sus reservas podrían convertirlo en uno de los cinco principales
productores de petróleo).
4. El país es cada vez más preponderante en los sectores textil, aeronáutico,
farmacéutico, automovilístico, siderúrgico y químico. La mayoría de los grandes
fabricantes de automóviles han establecido unidades de producción en el país.
El sector industrial representa más de un cuarto del PIB, pero experimenta una
fuerte desaceleración, que intenta frenar el plan "Brazil Maior“.
El sector terciario representa dos tercios del PIB y emplea a 60% de la población
activa. El país ha emprendido estos últimos años la producción de servicios con
alto valor añadido, especialmente en el ámbito de la aeronáutica y las
telecomunicaciones.