2. ¿Qué es un
tornado?
Antes se llamaba tornado a las tormentas que tenían lugar en las costas africanas. Ahora, por el
contrario, se denominan así unas trombas terrestres como nebulosas cuyo vértice está dirigido al
suelo.
Un tornado es un fenómeno aéreo que presenta el aspecto de un torbellino. En su parte superior
suele haber nubes de tipo cumulonimboso; y desde éstas baja el tornado en sí, que es una nube
de polvo con forma de chimenea o de embudo y cuyo principal componente son fuertes vientos
huracanados. El torbellino puede tener el eje vertical o inclinado. Y su extremo inferior se separa a
intervalos del suelo. La mayoría de ellos giran en el sentido de las agujas del reloj.
Los tornados pueden llegar a medir más de un kilómetro y medio en su base, logrando una altura
de hasta 15 km. Se desplazan a velocidades que en ocasiones sobrepasan los 200 km/h,
conteniendo en su interior vientos que se mueven con una velocidad de 500 - 600 km/h, aunque se
ha estimado que estas velocidades puedan superar los 800 km/h.
Podemos ver los tornados gracias al polvo aspirado hacia arriba y a las gotas de agua
condensadas que hay dentro de ellos. Es muy fácil, por lo tanto, que en su inicio nos parezcan
transparentes (o casi), puesto que aún no tuvieron tiempo de elevar la suficiente cantidad de polvo
que les da un aspecto grisáceo. Lo más frecuente es que se produzcan entre las 3 y las 9 de la
mañana, llegando a durar incluso más de una hora.
Es indudable que para mantenerse tan grandes y con esas velocidades requieren una gran
cantidad de energía. Esta energía se obtiene por diferentes vías: desde el calor de condensación
(el cual ayuda al aire a moverse a las velocidades necesarias para crear el tornado) hasta las
diferencias de presión que también ayudan a aumentar la velocidad de los vientos; pasando, por
supuesto, por el sol. Un tornado con velocidades de viento de 400 km/h tendrá una energía cinética
de un billón de vatios (lo que dos reactores nucleares); y la energía que tiene la tormenta que
forma los tornados es de la talla de 40 trillones de vatios.
3. Para que se haga realidadla formaciónde un tornado hace faltaque se
encuentrenpresentesen un mismolugaruna seriede condiciones
mínimasimprescindibles.
La formaciónde un tornado siempreestáasociadaa movimientos
violentosen laatmósfera. En primer lugarse han de encontraruna
corrientede aire fría y secoy otra de aire calientey húmedo. Una vez
choquen,se crea una columnade aire ascendentecon vientosgiratorios
que ganancada vezmás velocidad.
Se forman cuandola temperatura supera los26.5 gradoscentígrados,
perdiendofuerza cuandose dirigea aguasfrías o al entrar en tierra.
Su formacióncomienzacomo una lluvianormal: elvaporque se
desprendedel aguay asciende ala atmósfera, dondese enfría
y condensaen gotas de agua. La energía delvaporse liberay calienteal
airedealrededor,bajandosudensidad,loqueprovocaunadisminución
en la presiónatmosféricaen lasuperficiedelagua. Esta diferencia
de presiónconformalosvientos,que a su vez provocanvapory el ciclosé
retroalimenta.
6. Tipos de
tornados
Como es lógico, no todos los tornados son iguales. Los hay más grandes y más pequeños,
de mayor intensidad y de menor intensidad. El criterio de clasificación de tornados es la
fuerza que tengan. De esta forma, hay hasta seis clases diferentes de tornados.
F0. El F0 es el tornado más débil de los que hay; de hecho, es difícil que se le llegue a
considerar un tornado en sí, por los insignificantes daños que causa. Es el que más
comúnmente se puede ver. Suele llevar una velocidad cercana a los 100 km/h, tiene una
altura de medio kilómetro y unos 10 metros de ancho.
F1. Es un poco más fuerte que el anterior, los hechos son que éste ya es capaz de arrancar
tejados y sacar coches de la carretera; así como de mover casas. Su velocidad varía entre
los 140 y los 200 km/h. Mide de 2 a 6 km de altura y puede alcanzar los 50 m de ancho.
F2. Tiene una velocidad de entre 200 y 300 km/h, lo que le permite causar daños ya muy
graves. Es capaz de volcar furgones, arrancar árboles y demoler casas pequeñas.
Dimensiones aproximadas: 6-18 km de largo, 50-160 m de anchura en la base.
F3. Los F3 son tornados impresionantes, tanto con respecto a su fuerza como con respecto a
su tamaño. Su carácter de elevada peligrosidad les es conferido por su poder destructor, el
cual les permite derribar trenes enteros, levantar automóviles pesados e incluso arrancar
bosques. Se mueven a velocidades de 290-380 km/h y tienen un diámetro de base que va
desde los 200 m hasta el medio km. Su altura puede alcanzar los 50 km.
F4. Si bien el anterior tornado era muy fuerte, no hay palabras para describir a éste. Se suele
desplazar a velocidades que llegan a alcanzar los 500 km/h. Con una longitud de 60 a 183
km y una base de medio kilómetro a kilómetro y medio, sus efectos más visibles son coches
lanzados, construcciones débiles voladas y casas bien construidas elevadas.
F5. Tornados de estas características se dan en muy pocas ocasiones. La velocidad que
llevan supera en ocasiones los 600 km/h. Las consecuencias acarreadas por ellos son
devastadoras: desde levantar las estructuras de las casas y transportarlas durante un buen
trecho hasta árboles desenraizados o mover automóviles muy de gran tamaño por más de
100 m. En ocasiones alcanzan una altura de 580 km, pero normalmente no bajan de los 185
km.
7. CONSECUENCIA
Hay ocasiones en las que una misma
tormenta es capaz de crear muchos
tornados. Cuando esto ocurre los
resultados posteriores a la actuación
de los tornados son escalofriantes. En
mayo de 1999 en la zona de
Oklahoma y Kansas se pudieron
contar docenas de tornados (hasta 59)
que aparecieron en menos de un día y
recorrieron los dos estados. Muy
afortunadamente las consecuencias
no fueron demasiado nefastas, puesto
que no hubo más de 43 muertos
(dejando a parte los miles de casas
destruidas). El mayor daño fue
causado en la ciudad de Oklahoma,
donde barrios enteros fueron
arrancados del suelo. En varios de
estos tornados los vientos alcanzaban
la velocidad de 400 km/h.
8. Cómo Detectar
unTornado
Algunos tornados llegan sorpresivamente sin dar tiempo para sonar
las alarmas o sin estar acompañados por una tormenta. Es
importante saber que no siempre se pueden ver los tornados.
Algunas veces la lluvia o las nubes pueden afectar la visibilidad. Es
posible que se esté aproximando un tornado si:
Escucha un estruendo similar al producido por un tren de carga.
Observa un cielo oscuro o verdoso.
Observa una nube baja, grande y obscura.
Está cayendo granizo grande.
Si ocurre una de estas cuatro condiciones, busque refugio
inmediatamente y sintonice la información del estado del tiempo ya
sea en su radio o televisor.