El documento habla sobre cómo los objetos no humanos como semáforos, máquinas expendedoras y señales de tráfico ahora juegan un papel activo en la ciudad y en nuestras vidas. Estos objetos nos indican cuándo cruzar la calle, nos piden dinero, a veces nos pagan, nos distraen y nos dicen qué hacer, lo que sugiere que los humanos ya no están solos y que estos objetos no humanos proliferan en la ciudad.