El documento describe cómo el SIDA afecta emocionalmente a la persona y a su círculo familiar y amistades, los síntomas comunes como debilidad, cansancio, pérdida de peso y apetito, y una mayor susceptibilidad a otras enfermedades, y explica que no existe cura pero sí tratamientos para aliviar síntomas y cuidados para la salud que eviten complicaciones.