1. Carnaval en Asia La Fiesta de los faroles data de tiempos de la Dinastían Han, de 206 a.d.J.C. a 220 d.d.J.C. Y cuenta la leyenda china que corría el año 140 a.d.J.C. siendo Emperador Hanwu y uno de sus ministros, llamado Dongfangshuo, sorprendió en los jardines de palacio una dama de la corte, Yuanxiao, que tenía la intención de suicidarse arrojándose a un pozo. Cuando el ministro se interesó por los motivos que pudiese tener aquella dama para haber tomado semejante determinación supo que ella se quejaba de no haber visitado a sus padres desde que entró al servicio del Emperador.
2. El ministro trató de socorrerla y solucionar aquella situación y fingió que se estaba produciendo un incendio en la ciudad de Chang'an, sede de la Dinastía Han y solicitó del Emperador se encendiesen faroles que atrajesen a los lugareños y sirviesen de ofrenda a los dioses y Yuanxiao preparase unas bolas de arroz para satisfacer a la población. Los habitantes del lugar llegaron y entre ellos vinieron también los padres y familia de Yuanxiao. El Emperador ante aquella solución estaba muy satisfecho y ordeno que en rememoración de tan feliz acontecimiento todos los años venideros y por tales fechas se encendiesen faroles y preparasen las bolitas de arroz.
3. Otra versión… Mas existe otra leyenda que atribuye el hecho de encender faroles a la orden imperial de Han para adorar a Buda, religión que en aquella época se había extendido por China y que con el paso del tiempo aquel culto religioso se extendió y popularizó.
4. Sea cual fuese su origen el resultado es que la Fiesta constituye una de las mas importantes que se celebran durante el año en China. En los faroles también se suelen escribir acertijos, costumbre que data de la dinastía Song, entre los años 960 y 1279. A los acertantes de los acertijos se les obsequia con regalos.
5. CARNAVAL EN CANARIAS Fueron los conquistadores de las Islas quienes, llegados a Tenerife a mediados del s.XV, trajeron tradiciones ligadas con las fiestas del Carnaval, que se celebraban también en todos los dominios de la Corona. Sin embargo, consta que las familias pudientes de la isla, según testimonio de escritores y viajeros de la época, acostumbraban en el s.XVIII, a celebrar bailes y fiestas a los que invitaban a viajeros distinguidos. La plebe también celebraba los carnavales, aunque las autoridades civiles y eclesiásticas no aprobaban estas diversiones, por lo que se prohibían los bailes y bromas de las máscaras en las vías públicas. Los antecedentes de las máscaras del Carnaval eran las denominadas tapadas de Santa Cruz, quienes iban a la fiesta de la Calle del Pilar con sus rostros cubiertos.
6. Tras la caída de la Segunda República y el comienzo de la Guerra Civil española (1936-1939), se veta el Carnaval hasta la década de los setenta. A partir de 1945, los tinerfeños comienzan a celebrar el Carnaval de forma clandestina en sus casas, aunque tanto las autoridades civiles como el Clero siguen prohibiendo su celebración. En 1965 se acordó solicitar que las Fiestas de Invierno, como antes se denominaba a los carnavales, fuesen declaradas de interés turístico, por lo que dos años más tarde, en 1967, el Carnaval se convirtió en Fiesta de Interés Turístico Nacional. Anteriormente, ya había habido intentos de dar una mayor relevancia a la fiesta chicharrera por excelencia, y se declaró que el miércoles de Carnaval se denominase Día del Turista.
7. Historia del carnaval de Tenerife Cuenta la historia, que el Carnaval debió celebrarse en la isla desde los primeros años de la colonización. Con anterioridad al siglo XVIII apenas existen referencias al Carnaval en Tenerife y mucho menos aun en Santa Cruz. Solo se poseen algunas pertenencias de escritores y mas tarde, una serie de Disposiciones oficiales, "Especialmente prohibiciones". Durante el reinado de los Reyes Católicos parece cierto que era ya costumbre de disfrazarse en determinados días con el fin de gastar bromas en los lugares públicos.