UNA CONDICION, UNA VOCIÓN
“Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio,
nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que
anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las
tinieblas a su luz admirable”
1ª Pedro 2.9

ALGUIEN POR QUIÉN VALE LA PENA
PERDERLO TODO
Lo que en verdad significa la renuncia radical para Jesús
1

Una relación con Jesús requiere de una
devoción total, superior y exclusiva, es decir:
Una Entrega Radical, Jesús nos llamó
abandonar carreras, posesiones, a renunciar
a nosotros mismos. Debemos regresar con
urgencia al evangelio bíblico,
comprometernos a creer todo lo que nos
dice Jesús y obedecerle.

DEMASIADO HAMBRIENTO PARA
HABLAR
Cuando descubrimos la verdad y la belleza del evangelio
2

El evangelio nos muestra la profunda
necesidad de Dios y nuestra incapacidad para
llegar a Él. La proclama del evangelio nos
demanda y nos permite apartarnos del
pecado, tomar la cruz, morir a nosotros
mismos y seguir a Jesús, lo deseamos tanto
que abandonamos todo lo demás para
experimentarlo.
¡DANOS HAMBRE!

EL COMIENZO AL FINAL DE
NOSOTROS MISMOS
La importancia de confiar en el poder de Dios
3

Dios no nos da sólo el consuelo, sino al
Espíritu Santo que es el consolador, al
Ayudador que vive en nosotros, que nos dirá
qué decisiones tomar, y nos capacitará para
hacerlo. El modo de Cristo es dejar de
imponernos, crucificarnos a nosotros mismos,
pedirle a Dios que haga lo que sólo Él puede
lograr. Su poder vive en nosotros y no
necesitamos reunir nuestro propio poder.

EL GRAN PORQUÉ DE DIOS
El propósito global de Dios desde el comienzo hasta hoy
4

Dios nos creo con un propósito doble: Para
disfrutar de su gracia y para poblar la tierra y
extender su gloria. Nos dio a cada uno de
sus discípulos su Espíritu, y nos ordenó a
todos el mismo plan “hacer discípulos a
todas las naciones”, a pesar de tener dones
diferentes. Ni aquí ni allí, sino aquí y allí. Un
sueño mayor que implica impactar al mundo.

LA COMUNIDAD QUE SE MULTIPLICA
Cómo nos unimos a fin de cumplir el propósito de Dios
5

La apuesta de Jesús fue: Una revolución en
torno a unos pocos hombres. Hacer
discípulos es construir una relación, esto
implica identificarse con una comunidad,
estar expuestos a la vida de Cristo en otros,
asumir esta responsabilidad nos hace ser
reproductores de su palabra y no
receptores. Discipular y no esterilizar
cristianos.