2. Principio.
•Como hijos de Dios somos
responsables de cuidar las
puertas de nuestras vidas 1
Cor 4:1; Mat 25:14-30.
3. Derechos legales.
Por causa de obedecer la voz del Diablo, el hombre perdió los
derechos dados por Dios Luc 4:5-7.
Al nacer de nuevo, el creyente es libertado de la autoridad del
Diablo Col 1:13; Rom 6:16-18, disfrutando de los derechos de hijo
de Dios Efe 1:43; Luc 15:31; Rom 8:31-32.
Por esta razón, puede derrotar al Diablo Jn 12:31; 14:30; 1 Jn
5:18.
4. Derechos legales.
• Para que el Diablo pueda
afectar áreas de nuestra vida
tiene que obtener derechos
legales para hacerlo. Por eso
se nos dice que “No demos
lugar al Diablo” Efe 4:27.
5. ¿A quién abres la puerta?
• Yo estoy a tu puerta, y
llamo;
si oyes mi voz y me abres,
entraré en tu casa
y cenaré contigo Apoc
3:20 TLA.
6. El descuido.
Todo creyente es un soldado en
entrenamiento y a la vez, en el
frente de batalla Efe 6:12-18.
El problema común:
Descuidarse en la vida espiritual
y de las disciplinas espirituales.
9. La desobediencia.
Principio: La obediencia es la mejor
protección sobre nuestra vida, lo que
amamos y lo que tenemos.
La desobediencia puede ser:
Ignorancia de la dirección divina.
Desobediencia involuntaria.
Desobediencia voluntaria.
10. La desobediencia: El ejemplo
de Saul.
• Saul conocía la demanda
divina, pero hizo lo que le
parecía que estaba bien 1
Sam 15:1-9.
• La obediencia parcial es
desobediencia.
11. La desobediencia: El ejemplo de Saul.
La desobediencia
abre las puertas a
espíritus:
Espíritus de
adivinación,
brujería etc.
Espíritus de
idolatría.
12. Efectos.
Efectos personales: Perdió su reino, victima de
ataques malignos, perdida de su vida.
Efectos espirituales: Involucra con el mundo
maligno al consultar con adivina.
Efectos familiares: Sus hijos fueron afectados de
manera directa.
Notas del editor
1 Cor 4:1;
Mat 25:14-30
Luc 4:5-7 DHH Luego el diablo lo levantó y, mostrándole en un momento todos los países del mundo, 6 le dijo: —Yo te daré todo este poder y la grandeza de estos países. Porque yo lo he recibido, y se lo daré al que quiera dárselo. 7 Si te arrodillas y me adoras, todo será tuyo.
Col 1:13 DHH Dios nos libró del poder de las tinieblas y nos llevó al reino de su amado Hijo,
Rom 6:17-18 DHH Ustedes saben muy bien que si se entregan como esclavos a un amo para obedecerlo, entonces son esclavos de ese amo a quien obedecen. Y esto es así, tanto si obedecen al pecado, lo cual lleva a la muerte, como si obedecen a Dios para vivir en la justicia. 17 Pero gracias a Dios que ustedes, que antes eran esclavos del pecado, ya han obedecido de corazón a la forma de enseñanza que han recibido. 18 Una vez libres de la esclavitud del pecado, ustedes han entrado al servicio de la justicia.
Jn 12:31 Ya está aquí el juicio de este mundo; ahora el príncipe de este mundo será echado fuera
Jn 14:30 No hablaré mucho más con vosotros, porque viene el príncipe de este mundo, y él no tiene nada en mí;
1 Jn 5:18 DHH Sabemos que el que tiene a Dios como Padre, no sigue pecando, porque el Hijo de Dios lo cuida, y el maligno no lo toca.
Mat 12:43-45 TLA Cuando un espíritu malo sale de alguien, anda por el desierto buscando donde descansar. 44 Al no encontrar ningún lugar, dice: “Mejor regresaré a mi antigua casa y volveré a vivir en ella”. Cuando regresa, la encuentra desocupada, limpia y ordenada. 45 Entonces va y busca a otros siete espíritus peores que él, y todos ellos entran en aquella persona y se quedan a vivir allí. ¡Y esa pobre persona termina peor que cuando sólo tenía un espíritu malo! Esto mismo va a pasarles a ustedes, porque son muy malos.
1 Sam 15:22-23 TLA 2 Pero Samuel le dijo: «A Dios le agrada más que lo obedezcan, y no que le traigan ofrendas. Es mejor obedecerlo que ofrecerle los mejores animales. 23 »Rebelarse contra Dios es tan malo como consultar a brujos y a adivinos. No está bien adorar a dioses falsos, ni tampoco desobedecer a Dios. Como tú no quieres nada con él, Dios tampoco quiere nada contigo».