Este documento describe la importancia de una alimentación adecuada para bebés y niños pequeños para apoyar su desarrollo físico, mental y social. Explica que entre los 0-4 meses los bebés deben alimentarse principalmente con leche materna o de fórmula, y entre los 4-6 meses pueden empezar a comer cereales, purés de verduras y frutas. Entre los 6-8 meses se recomiendan arroz, carne magra y entre los 8-12 meses pescado, yogures y yema de
2. DEFINICIÓN
La alimentación es un proceso voluntario,
mediante el cual elegimos los alimentos y la forma de
consumirlos. Es el modo en que se proporcionan al
organismo aquellos alimentos que le son
imprescindibles. Es uno de los instrumentos más
eficaces para la prevención de enfermedades, en
especial, las denominadas carenciales, y la
promoción de la salud. Una alimentación adecuada
favorece que el desarrollo físico e intelectual sean
correctos
3. La buena y adecuada alimentación en los bebés
y los niños es fundamental para un sano y normal
desarrollo de todas sus capacidades, tanto físicas,
mentales y sociales.
Un niño mal alimentado no solo tendrá problemas
en su desarrollo físico, sino que además su
capacidad analítica y de relacionamiento con los
demás y su capacidad de adaptación a nuevas
situaciones y ambientes, se verá seriamente
afectada.