La civilización azteca se estableció en el valle de México en el siglo XIV y fundó su capital Tenochtitlán, desde donde dominó a los pueblos vecinos y estableció un imperio poderoso basado en su fuerte ejército. La economía azteca se centraba en la agricultura de cultivos como el maíz, la calabaza y los frijoles. La sociedad azteca estaba dividida en nobles y trabajadores comunes. El emperador era considerado divino y los sacerdotes controlaban la religión,