2. Son materiales cuya resistencia al paso de la electricidad
es muy baja. Los mejores conductores eléctricos son
metales, como el cobre, el oro, el hierro y el aluminio, y sus
aleaciones, aunque existen otros materiales no metálicos
que también poseen la propiedad de conducir la electricidad,
como el grafito o las disoluciones y soluciones salinas (por
ejemplo, el agua de mar) o cualquier material en estado de
plasma.
3. Para el transporte de energía eléctrica, así como para cualquier instalación
de uso doméstico o industrial, el mejor conductor es el cobre (en forma de
cables de uno o varios hilos). La plata también es un buen conductor, pero no
es tan bueno como el cobre, y debido a su precio elevado no se usa con tanta
frecuencia. También se puede usar el aluminio, metal que si bien tiene una
conductividad eléctrica del orden del 60% de la del cobre, es sin embargo un
material tres veces más ligero, por lo que su empleo está más indicado en
líneas aéreas que en la transmisión de energía eléctrica en las redes de alta
tensión.1 A diferencia de lo que mucha gente cree, el oro es levemente peor
conductor que el cobre; sin embargo, se utiliza en bornes de baterías y
conectores eléctricos debido a su durabilidad y “resistencia” a la corrosión.
4. La conductividad eléctrica del cobre puro fue adoptada por la
Comisión Electrotécnica Internacional en 1913 como la referencia
estándar para esta magnitud, estableciendo el International Annealed
Copper Standard (Estándar Internacional del Cobre Recocido) o IACS.
Según esta definición, la conductividad del cobre recocido medida a 20
°C es igual a 58.0 MS/m.2 A este valor es a lo que se llama 100% IACS y
la conductividad del resto de los materiales se expresa como un cierto
porcentaje de IACS. La mayoría de los metales tienen valores de
conductividad inferiores a 100% IACS pero existen excepciones como la
plata o los cobres especiales de muy alta conductividad designados C-
103 y C-110.3
5. Usos
Aplicaciones de los conductores:
Conducir la electricidad de un punto a otro (pasar electrones
a través del conductor; los electrones fluyen debido a la
diferencia de potencial).
Crear campos electromagnéticos al constituir bobinas y
electroimanes.
Modificar la tensión al constituir transformadores.