Shawn Fanning creó Napster en 1999 mientras estudiaba en la universidad, inspirándose en crear un programa que hiciera fácil compartir archivos MP3 entre usuarios. Napster se hizo muy popular rápidamente, pero también se convirtió en el objetivo de demandas legales de compañías discográficas. A pesar de ser cerrado, Napster significó un cambio en cómo la gente compartía música en Internet y abrió las puertas para futuros servicios de intercambio peer-to-peer.

1. Trabajo de informática 1
Luis Armando Sánchez
CI:24423728

2. Shawn Fanning
Shawn "Napster" Fanning (nacido en 1980
en Brockton, Massachusetts, Estados
Unidos) fue quien creó Napster, uno de los
primeros programas peer-to-peer de
popularidad masiva para compartir archivos,
en 1999.

3. ¿Que hizo? Y ¿como lo hizo?
Motivado por un amigo que tenía dificultades
para conseguir varios archivos MP3 que le
interesaban, Fanning empleó sus horas de sueño
de varios meses escribiendo el código de un
programa que haría fácil el compartir música
entre usuarios. Creó el programa mientras
estudiaba en la Boston's Northeastern University.
Seguramente se inspiró en el sistema Hotline de
Hotline Communications, el auténtico pionero de
las redes peer-to-peer, que llevaba en
funcionamiento para Mac OS desde 1996. Fue
portada de la revista Wired magazine y empezó a
tomar fama, pero poco después, Napster se
convirtió en el objetivo de las compañías
discográficas por motivos legales, y tras varios
juicios consiguieron que se cerrara el servicio de
Napster.

4. Biografía
Héroe y villano, el padre de Napster.
Shawn Fanning, y por sobre todo su creación,
Napster, significaron todo un símbolo para la
música. Para algunos un símbolo negativo, como
las discográficas, que al final terminaron
succionándolo con sus monstruosas demandas;
pero para millones de usuarios, una ventana
abierta al nuevo mundo del intercambio de música
gratis a través de Internet utilizando el concepto
P2P.
Este joven que en algún momento hizo temblar a
las discográficas, perteneció a una familia humilde,
aunque contó siempre con el apoyo de su tío John
Fanning, una especie de padre espiritual ya que a
su padre verdadero –un músico que andaba de
giras- no le importó que la joven de 17 años con la
que salía quedara embarazada y la dejó para
seguir con su itinerario

5. Gracias a su tío terminó el secundario y tuvo su primera Apple Macintosh. Ya fanático
de Internet y de los chats, en la universidad comenzó a enloquecerse por el formato
MP3 y el WINAMP. Pero como era casi imposible encontrar sitios para la descarga en
MP3 –algo con lo que también lo venían torturando sus amigos y compañeros-decidió
que había llegado el momento de crear un nuevo sistema.
En enero de 1999 dejó la universidad y se instaló en la oficina de su tío, fabricante de
juegos para computadora. Con muchos días sin dormir sobre sus hombros,
finalmente en junio de ese mismo año, Napster vio la luz. Así fue como aquella idea
de crear un programa de intercambio de archivos de música para sus compañeros, al
año ya tenía 25 millones de usuarios y dos años más tarde se convirtió en uno de los
programas más utilizados por los internautas.

6. El final no fue muy feliz. Podríamos decir
que Napster terminó tras las rejas. Lo cierto
es que así como crecía su fama, también
paralelamente y en la misma proporción,
crecían las demandas. Compañías
discográficas, la RIAA (Asociación de la
Industria Fonográfica de EE.UU.) e incluso
bandas como Metallica lo condenaron por
violar el derecho de propiedad intelectual
de las canciones y lo llevaron a la justicia.
La frase de la jueza que dictó la sentencia
en contra de Napster en 2001 fue muy
clara: “Ustedes han creado este monstruo y
a ustedes les toca buscar una solución”. Ya
estaba todo dicho. Declararon a Napster en
bancarrota y fue comprado por
Bertelsmann, para pasar finalmente a
manos de Roxio que lo adquirió por cinco
millones de dólares.

7. Pero los 60 millones de usuarios registrados no se quedaron de brazos cruzados, ni
tampoco quienes vieron en Napster el inicio de una nueva era musical, que utilizaron su
estructura para organizar servicios de intercambio de música online gratis cada vez más
complejos y difíciles de controlar.
Tampoco para Fanning las cosas terminaron allí. Tras unos años de estar fuera del
negocio, apareció en 2005 con un nuevo servicio, Snocap el que, paradójicamente a lo
que fueran los inicios de Napster, es un servicio en red para detectar una grabación
musical y cobrar los derechos de autor.
Quizás por todas las demandas que debió padecer durante los dos años de vida de
Napster, lo cierto es que ahora llegó a acuerdos con las principales discográficas (si, esas
que en su momento lo demandaron) para que carguen su contenido en una gran base
que posibilita rastrear el tráfico de la música en Internet. Su idea es “una red mundial de
servicios P2P legales”.
En definitiva, la creación de este joven que actualmente sólo tiene 25 años significó
toda una revolución que permitió el intercambio de música gratis online, algo que
repercutió en el millonario negocio de las discográficas y si bien le pusieron fin, las
bases de lo que sería este tipo de intercambio quedó abierta para los que vinieron
luego.