Proverbios (hebreo מִשְׁלֵי, Mishlei) es un libro bíblico del Antiguo Testamento y del Tanaj hebreo, que se clasifica entre los Libros Sapienciales del cristianismo, y entre los Ketuvim o "Escritos" del judaísmo. Está compuesto por extensas colecciones de máximas o sentencias de contenido religioso o moral y se ubica en la Biblia entre el libro de los Salmos y Eclesiastés, y en la Biblia judía entre los libros de Job y Rut.
2. 19 El que se deja arrebatar por la ira llevará el castigo, y si usa de violencias,
añadirá nuevos males.
19 El que mucho se enoja, recibe su merecido; librarlo del castigo es empeorar las
cosas.
20 Escucha el consejo y acepta la corrección: así serás sabio en tu vejez.
20 Atiende al consejo y acepta la corrección; así llegarás a ser sabio.
21 Muchos pensamientos hay en el corazón del hombre, pero el consejo de
Jehová es el que permanece.
21 El hombre hace muchos planes, pero sólo se rea-tiza el propósito divino.
22 Una satisfacción es para el hombre hacer misericordia, y mejor es un pobre
que un mentiroso.
22 Lo que se quiere del hombre es lealtad; más vale ser pobre que tramposo.
23 El temor de Jehová lleva a la vida: con él vive del todo tranquilo el hombre y no
es visitado por el mal.
23 La reverencia al Señor conduce a la vida; uno vive contento y sin sufrir ningún mal.
24 El perezoso mete su mano en el plato, pero ni aun es capaz de llevársela a la
boca.
RENUNCIAR A LOS HÁBITOS PECAMINOSOS
18 Castiga a tu hijo mientrashaya esperanza, pero no se excite
tu ánimo hasta destruirlo.
18 Corrige a tu hijo mientras aún pueda ser corregido, pero procura
no matarlo a causa del castigo.
3. 24 El perezoso mete la mano en el plato, pero no es capaz ni de llevársela a la boca.
25 Hiere al escarnecedor y el ingenuo se hará precavido; corrige al inteligente y
aumentará su conocimiento.
25 Del castigo al insolente, el imprudente aprende; el sabio aprende con la sola
corrección.
26 El que roba a su padre y ahuyenta a su madre es un hijo que causa vergüenza
y acarrea oprobio.
26 Maltratar al padre y echar de la casaa la madre son actos vergonzosos y reprobables
en un hijo.
27 Cesa, hijo mío, de prestar oído a enseñanzas que te hacen divagar de la
sabiduría.
27 Hijo mío, si dejas de atender a la reprensión te apartarás de los buenos consejos.
28 El testigo perverso se burla del juicio; la boca de los malvados encubre la
iniquidad.
28 El testigo falso se burla de la justicia; el malvado lanza maldad por la boca.
29 Preparados hay juicios para los escarnecedores y azotes para las espaldas de
los necios.
29 Listas están las varas para los insolentes; los buenos azotes para la espalda de los
necios.