3. Mientras las hermanas miraban el billete,
cristobal colón llegó en taxi a la catedral
después de un largo viaje en avión. Entró en
la catedral de Altamura, exahusto optó por ir
a la izquierda, en la gruta, se quedó sin
palabras cuando asombrado contempló la
hermosura del belén. Pero tenía que
aparentar que era muy soso y apagado.
Para vengarse de Federico II de Suabia por
la vergüenza que le hizo pasar de pequeño
cogió lo más significante en el belén y se
marchó
4. Sara, ¿Porque no vamos a Sevilla, quizás encontremos
allí al niño Jesús?
-Noelia, yo no quiero ir, sabes que lo de salir de Italia no
me gusta.
-Vamos Sara, quiero ir a Sevilla me gustaría broncear me
un poco, estoy muy blanca.
-Esta bien, pero nada más saldremos en esta ocasión no
viajaremos más.
-Vale - Decía Noelia sonriendo - Sera divertido.
Las dos fueron al aeropuerto, allí se subieron al avión y
se sentaron.
-¿Qué extraño, solo hay seis asientos? - Dijo Noelia
preocupada.
-Buenos días señoritas, les deseo un agradable vuelo, si
necesitan algo estaré por aquí.
Era un señor mayor, iba vestido con un esmoquin, pelo
corto y gris, ojos verdes de mirada cansada, y una piel
que se podría decir que es casi lisa.
5. - Creo que el billete que encontramos era de dos plazas
de un avión privado. -Imposible pero asombroso
pensaba Sara- No me lo puedo creer, dichosa es la
suerte que hemos tenido.
El avión después de tres horas y media llegó a su
destino. Noelia y Sara bajaron del avión, cogieron un
taxi y se fueron al Barrio Santa Cruz. Estaban dando
vueltas por sus
numerosas calles todas
tenían es toque de
barrio, con sus casas
pequeñas, las paredes
agrietadas...
Llegaron a la calle
Susona, y Noelia que se
había llevado su cámara
le sacó una foto al
azulejo con un cráneo.
6. Mientras tanto Federico II de Suabia, cogió un avión para
buscar a Cristóbal Colón. Las hermanas estuvieron en el
patio de los naranjos y contemplando estos árboles,
muchísimas flores blancas decoraban estos árboles como
las bolas de navidad que se ponen en el árbol, cuando
una brisa trajo el hermoso olor a azahar, que te recorría
las fosas nasales y recorría tu cuerpo, hasta la sangre olió
este hermoso olor.
Y una pequeña
fuente, que se
encontraba a la
izquierda y en el
centro, con sus
aguas claras, su
brillante mármol
blanco, parecía de
cuento de hadas.
7. -Noelia ¿Qué es eso?
-Parece una nota
-A ver que dice.- Sara se acercó disimuladamente y
cogió la nota, seguidamente la leyó:
-Hola Noelia y Sara, soy Federico II os he dejado
esta pista para que me ayudéis, Cristóbal Colón a
robado al niño Jesús, yo no sé dónde está.
Un saludo.
Estuvieron viendo la tumba de Colón, Sara se había
informado de este sepulcro y le contó todo lo que
sabía a Noelia.
Entraron en la catedral sus luz era escasa, y un lugar
muy amplio. Que belleza, decían sus ojos al
contemplar el retablo
8. -Mira estos cuatro reyes sujetan una especie de caja, en su
interior se encuentran los restos de Cristóbal Colón, cada rey
representa un reino en la antigua España, Híspania. Y fue
cuando a Noelia se le ocurrió un sitio donde quizás podía estar
el niño Jesús. Subieron las 35 rampas y 17 escalones para
llegar a arriba de la giralda. Está ahí el niño Jesús estaba
mirando las piscinas de los hoteles más cercanos, daban
ganas de zambullirse en la piscina.
- Por fin te encontramos te hemos buscado por todos los
rincones de Sevilla.
-Si Federico II me ayudó me había robado Cristóbal Colón,
aunque solo quería vengarse, él en realidad ha sido muy
bueno, me ha llevado a comerme una tortilla de patatas,
hemos ido a jugar a una bolera, y más cosas, ahora me está
ayudando quiero ir a ver unos amigos que tengo en
Montequinto, son de un colegio, ¿Cómo se llamaba?, ¡Ah!
Gloria Fuertes.
- Si tienes tantas ganas vamos allí ya que estamos, podemos
ir de paso.
9. Llegaron a Montequinto, y fueron al colegio Gloria Fuertes,
a la clase de 6°A. En ese instante Su profesora María José
estaba impartiendo clase de Lenguaje, pero se detuvo un
momento para enseñarles a sus alumnos en la pizarra
táctil, una entrada del blog de la clase, un cuento titulado
“Misterio en la catedral", entonces llamaron a la puerta.
10. -¡TOC-TOC!
Era el niño Jesús y las dos hermanas monjas. Pasaron
todos la mañana juntos. Cuando el reloj marcaba las dos
menos cinco, el niño Jesús se despidió y se fueron.
Llegaron al aeropuerto, se dirigieron a su avión
correspondiente. Llegaron a Bari felices y contentos de la
experiencia
vivida en Sevilla.
Allí para celebrar la
llegada del niño
Jesús prepararon
una fiesta, justo ese
día unos niños
vivieron de
excursión a la
catedral, según sus
chándal eran del
colegio San
Francesco di Assis.