1. EL HOMBRE
Y SU MUNDO Por Marco Delgado y Sergio Meade
Las personas actúan saliendo fuera de si para relacionarse con todo lo demás y es en ese
salir en donde se entran las posibilidades para decidir la acción, en ese proceso de
elegir, decidir y actuar se va determinando la forma de ser de cada persona y actúan en
un doble horizonte: el temporal y el espacial.
•Temporal: es a partir de la experiencia, es decir, la
presencia del pasado en el presente y con ello se
toman decisiones.
•Espacial: actuamos en un lugar, en un sitio, dentro de
un contexto.
Los medios y los mediadores en un contexto globalizado
La relación entre hombre y mundo se da originalmente en forma directa, esta interrelación se
produce a través de procesos de interacción como se decía al principio, en horizontes temporales y
espaciales.
Al querer ampliar los horizontes, aparecen las estrategias comunicativas y entran en escena los
mediadores, ya que sin mediador no hay alguien que haga posible el mensaje y su movimiento.
Los mediadores amplían las posibilidades de interrelación hombre-mundo pero también como tales
pueden afectar la pureza de la información.
Los medios de comunicación masiva en dos escenarios
Los Medios de comunicación masiva son los mediadores por excelencia en la relación existencial
entre el hombre y su mundo, a través de ellos nos exponemos al bombardeo de la información y
esto hace que las decisiones frente a la gran variedad de opciones sea mas complicadas.
Si no estamos suficientemente preparados permitimos que los medios tomen decisiones por
nosotros y para esto surgen dos escenarios:
Los profetas del desastre: Esto es el hecho de que los medios determinen el menú de opciones
de interrelación y la elección que hacemos de ellos para actuar y existir.
Convierten a los individuos en masa y anulan identidades, homogeneizan las culturas y determinan
el consumo de acuerdo con intereses dominantes.
Los anacoretas del desierto: Es el aislarte de los medios pero con esto estaríamos
desperdiciando opciones ya que no se acepta que los medios entren de intermediario pero
tampoco podemos permitir que los medios pasen a decidir por nosotros.
En el primer caso tenemos una abundancia que nos hace incapaces de decidir y en el segundo
una escasez de opciones que nos hace incapaces, pero al final el resultado seria el mismo en
ambos casos: el desperdicio de posibilidades.