3. Siempre me pregunte por que mis vecinos no salían de su casa, mis
padres me decían que ellos eran raros, que no les hablara pero a mi me
llenaba de intriga.
-¿Cómo puede ser que un apersona no salga de su casa?
Por las tardes me ponía a imaginar como era su casa por dentro, o por
que no salían.
- ¿Estarían encantando o son fantasmas?.
No lo sabia, así que me arme de valor y con mis amigos fuimos a ver la
casa.
Al día siguiente nos preparamos para ver de día,
si eran vampiros retarían dormidos, cuando
saltamos la cerca del frente sin que nadie nos
viera y vimos que tenían un perro pequeñito,
4. pero no era un gran problema, pero al abrir la puerta nos
encontramos con un perro como de dos metros y medio que salió por
debajo de la casa.
Cuando nos mostró sus dientes yo era el único que seguía ahí parado
y terminé con la ropa toda desgarrada.
A la tercera es la vencida dice mi papa, no se que significa así que
dijimos que íbamos distraer al perro con un pedazo de embutido.
Llegamos a la casa, llamamos al perro, cuando vino corriendo le
lance el embutido y de un solo bocado se comió la mitad. Cuando el
perro estaba ocupado corrimos y nos metimos a la casa de los
vecinos para ver que pasaba en verdad ahí dentro.
Cuando entramos a la casa vimos muchas cosas raras, como animales
disecados en poses muy terroríficas. Decidimos que cuando alguien se
asustara que cerrara los ojos para que pase el susto.
5. Escuchamos que alguien venia, anos escondimos detrás del sofá, pero
el sofá estaba del lado del patio trasero de ese lado la pared era de
cristal y el señor de la casa nos estaba mirando desde que entramos a
su casa. Nos miramos unos a otros buscando una explicación. El señor
nos llamó con la mano nos dijo que nos sentáramos, yo estaba
sudando. El señor sonrió y se le vio unos colmillos, como vampiros. La
puerta se cerró sola y escuché, era una broma antes de desmayarme.
Cuando desperté vi al señor sonriéndome y me dijo que mis amigos
hablaron con sus hijos para que me hicieran una broma por que yo era
muy curioso.