El documento resume la situación en Japón después del terremoto y tsunami, incluyendo el número de muertos y desaparecidos, las evacuaciones, y la crisis en la planta nuclear de Fukushima. También cubre temas de explotación infantil, especialmente en el sur de Asia, donde más de 100 millones de niños trabajan en condiciones peligrosas por bajos salarios. Finalmente, discute los problemas de contaminación y residuos tóxicos debido a la industrialización.