La persona expresa su amor por alguien y desea ser correspondido de la misma manera. Extraña mucho a esa persona y desea que su amor sea como el mar, con un comienzo pero sin final. Aunque sus ojos dicen "te quiero", no pide explicaciones con palabras ya que se las lleva el viento, y guarda sus miradas en el corazón. Desea tener una pelea donde sus cuerpos sean las armas y la cama el campo de batalla.