El poema habla de un amor único e irremplazable. Detrás del amado sólo hay bruma e incertidumbre. El poeta compara su amor con un pájaro al que deja ir para que sea libre, pero que siempre podrá regresar porque nadie ocupará su lugar. A pesar de la bruma y la soledad, el amado siempre ha estado presente de forma silenciosa y paciente. No hay ninguna otra persona que pueda igualar este amor.
1. “ Tan sólo tú”
O tú o ninguno.
No tengo salida
Pues detrás de ti, mi amor,
Tan sólo hay bruma.
Es cierto. Sólo hay bruma
Detrás de ti,
De tu océano infinito.
De tu historia, tan particular,
Sólo queda entre mis dedos
Un poco de bruma
De alquimia milenaria;
Que se escurre entre ellos
Como el agua en deditos infantiles.
“Tan sólo tú”, suena tan fuerte,
2. Tan heavy, tan duro, tan pesado
Y prepotente.
Es como si le dijera a un pájaro:
“Eres mío”; y como dice el dicho:
“podrás tener al ave, pero no su canto”.
El pajarillo del cual les hablo,
Del que no tengo salida, anhela su libertad.
Soy valiente y se la entrego en mano;
Como diciendo:
Anda, remonta el vuelo, gorrión mío.
Eres joven e inexperto,
Revolotea por la vida y,
Si añoras la jaula
De la que te dejé partir un día, vuelve.
Porque ninguno ocupó ni ocupará tu lugar.
Porque tan sólo tú, sólo tú,
Eres el dueño del castillo
Y su prisión;
Del pájaro y la flor.
Y detrás de ti, mi gran Amor;
3. Hay un abismo lleno de bruma
Que no es cárcel, es espuma
Que lava mi soledad
Y la bendice.
Pero me engaño,
Porque siempre has estado allí,
Entre la niebla:
Silencioso y paciente;
Diciéndome con la mirada:
O tú o ninguna.
No hay ninguna igual
Ni habrá ninguna
Desde el momento en
Que la bruma
Te cubrió por completo
Y te dejó solo y conmigo
En el firmamento azul
De mi existencia.-
Rosana Waisman.-
28/12/2010