El poema describe un lugar misterioso al que nunca se puede llegar a pesar de andar y andar. Este lugar se ve a lo lejos pero siempre está más allá de los destinos de uno. No se puede acceder a él ni a pie ni con el sentimiento, ya que está protegido por los reversos. Es un lugar al que no se puede cerrar la puerta ni llegar donde están los pestillos.