6. Sector Comercial: Cañada de Gómez se caracteriza por la existencia de un gran y variado número de establecimientos comerciales, que dan como resultado un alto nivel de productividad y de la mano de obra. Debido a las características de las localidades vecinas se nota una tendencia de un mercado en expansión del sector, que constituye a la ciudad en un verdadero polo comercial de la región.
7. Agricultura: Por las características del suelo y del clima, la agricultura redunda en excelentes rendimientos. Es una de las principales actividades económicas. En tanto que la ganadería comprende la cría de ganado vacuno y porcino. Con relación a estas actividades, se desarrollan otras como secado de cereal, provisión de semillas, asesoramiento veterinario, entre otras.
8. Industria: En cuanto a las industrias, los principales rubros son: fabricación de muebles, de calzados, vehículos para transporte de cargas, faros para vehículos, electrificadores para alambrados rurales, micro-moledoras de granos y cortadoras de césped, elaboración de pinturas, envases corrugados, lavandinas, detergentes, desodorantes, insecticidas y fluídos, bebidas no alcohólicas y helados. Durante muchos años Cañada de Gómez fue una de las pocas ciudades de la región que no contaba con un predio destinado a radicación de industrias. Hoy se ha logrado revertir esa tendencia. La actual administración municipal llevó a cabo el lanzamiento del Parque Industrial, que ha sido el de más rápido crecimiento de la provincia de Santa Fe. Constituye 40 hectáreas en el corazón de la región centro y se encuentra estratégicamente ubicado sobre Ruta 9, bajada autopista y Ruta Provincial 91. Hasta el momento se han radicado cerca de quince empresas. Esto significa para la ciudad y la región un notable incremento de la productividad y la generación de cientos de puestos de trabajo. Son parte de este crecimiento, industrias de gran impacto en el desarrollo de la ciudad. Como ser la centenaria Helvética, que fue una de las fábricas de acoplados más importantes de Sudamérica y llegó a contar con más de mil operarios. Hoy esta empresa recuperó su liderazgo y volvió a ser un símbolo de prosperidad. Lo mismo sucede con Vitrofín, una de las cristalerías más importantes del país, dedicada a la elaboración artesanal de copas. Convertida en Cooperativa de Trabajo, ésta fábrica honra a los cañadenses por su trayectoria y por la lucha de sus obreros para recuperar la fuente de trabajo de cientos de familias.