El documento describe las vacaciones de la persona en Playa del Carmen, Quintana Roo, donde disfrutó de la playa y el mar con su familia. Un día fueron a pescar a La Caleta, donde tuvieron éxito al capturar varios peces grandes. Por la tarde descansaron y por la noche hicieron una fogata para contar historias. Al final limpiaron y partieron con esperanzas de regresar.
1. Mis Vacaciones
uve la dicha de poder estar en playa del Carmen, en Quintana Roo, y disfrutar de la playa y del sol candente que ahí hay. Mis tíos y mi familia organizaron un campamento en dichas playas por ser muy bellas y, al igual que yo, disfrutar al máximo de estas vacaciones contemplando el mar, las olas rompiendo en la orilla, las palmeras, en fin un maravilloso panorama que brinda relajamiento y tranquilidad al paseante.
Mi papá nos invitó a todos a un día de pesca en La Caleta, por lo que al día siguiente nos pusimos en camino hacía allá, que está a unos 20 minutos de nuestro campamento. Según la gente del lugar, ahí hay una pesca abundante y con peces de buen tamaño, así es que al llegar el entusiasmo era bueno y nos dispusimos a poner carnada en nuestros anzuelos y comenzar con la pesca. Poco tiempo había transcurrido cuando mi papá, con uno poco más de experiencia y paciencia, logró sacar su primer pescado, contagiándonos su entusiasmo y alegría. Fui yo el segundo en obtener una buena presa, y más tarde todos los demás comenzaron a sacar una buena cantidad de pescados. Antes de que el sol se pusiera más fuerte, dimos por
terminada la pesca, ya con una buena cantidad de presas. Al llegar al campamento, mi mamá y mi tía, que se habían quedado para preparar el desayuno, se quedaron sorprendidas por la cantidad de pescados que sacamos y comentaron que los prepararían para el almuerzo.
Hicimos competencias de nado y de buceo y luego de cargaditas, en la que salimos vencedores mi primo y yo. Mi papá nos gritó que la comida estaba lista, así que nos apresuramos para ir a comer lo que habían preparado con mucho cariño mi madre y mi tía.
Descansamos por la tarde y en la noche hicimos nuestra fogata para asar malvaviscos y contar cualquier cantidad de historias y cuentos, algunos de terror y otros de mucha risa.
Llegó el día de nuestra partida y preparamos el regreso, no sin antes limpiar y recoger totalmente la basura y dejar el lugar con tristeza, pero con la esperanza de que podamos volver en otra ocasión a divertirnos y pasar unas excelentes vacaciones.
Como habrás notado, es sencillo y divertido relatar algún acontecimiento de nuestras vidas. L herramienta del procesador de textos Word nos permite hacer esto y mucho más. Veamos algo más de lo que nos puede ofrecer esta herramienta.
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