1. Siempre mi sueno fue escribir, sin embargo nunca supe de que, o en donde
escribiría. Sin embargo, hace unos días se me ocurrió la idea de contar mis
historias con los regalos para mi novio. Ha sido una aventura este
tiempo con el y aunque ya no esta, quisiera recordarlo contando parte de
nuestra historia, aunque sea la parte de los regalos que me hace muy feliz.
Siempre nos regalábamos cosas. Recuerdo desde el principio de nuestra
relación, estábamos muy enamorados, y el siempre buscaba una escusa
pequeña para traerme una flor. Día tras día, se las arreglaba para
buscarme una flor diferente. Sus regalos hacían que la relación brillara
porque no se que era, pero como me miraba cuando yo recibía sus regalos
era como si en ese pequeño minuto, todo el universo hubiese decidido para
de moverse y fuésemos el
y yo solos, enamorados
para toda la vida. El
brillo en sus ojos cuando
le traía algo. Incluso mi
madre, cuando le
ensenaba los regalos
para mi novio, lloraba
2. de alegría al verme tan feliz.
A mi siempre me gusto mucho decorar, incluso tome clases de arte y de
cualquier cosa sacaba un regalo para el. Con una cinta roja una vez al
principio recuerdo le hice un corazón y se lo deje en la puerta de su casa. El
fue a buscarme en seguida que lo vio. Su madre pensaba que estaba loca,
pero nunca deje de hacerle los regalos para mi novio, porque no me
importaba nada mas si el y yo éramos felices.
La vida continuo y seguimos siendo novios aun cuando los problemas eran
mas grandes y las chambelonas ya no solucionaban nada. El llegaba del
trabajo a pasar por mi casa siempre a dejarme algo y siempre que salíamos
de paseo, pasábamos por la playa del pueblo y me señalaba una casa de la
montana y decía: “Ves esa casota? Un día la pinto de blanco y será mi
regalo de bodas.” Entre fantasías vivíamos el día a día, pero siempre
sabiendo que los regalos nos despertaban el alma. Nada mas lindo que
enamorarse de un hombre de detalles, que siempre tuviera una sorpresa
esperando. Eso de las sorpresas es cosa mas de mujeres, nosotras siempre
estamos pensando y sonando con eso, sin embargo cuando ellos lo hacen,
cambia totalmente la relación. Esto lo hacia único, y por esa razón nunca
podre sustituirlo, porque siempre estaré esperando sus flores, sus canciones,
sus poemas, sus sonrisas al mirarme, y sus ansias de enamorarme.
La vida siempre fue una fantasía y la mía yo la viví con el. Eternamente
enamorados siempre
estuvimos, entre
regalos para mi
novio y los regalos de
el para mi, fui feliz. No
importa si nunca
tuvimos la casa blanca
de la montana, porque
3. en nuestro rinconcito del planeta tuvimos mucho mas. No nos perdimos
nada de la vida, sino que la vida perdió mucho cuando nos fuimos nosotros.
Puede que existan mas regalos, pero nada que ver con los que me regalo un
día mi novio.