El documento describe el encuentro entre las naves peruanas Huáscar y BAP Unión y las divisiones navales chilenas el 8 de octubre. Grau ordenó maniobras evasivas para permitir que la Unión escapara mientras era perseguida por los buques chilenos Blanco Encalada, Covadonga y Matías Cousiño. Más tarde, los buques peruanos fueron rodeados por tres divisiones navales chilenas, dejándolos sin otra opción que navegar hacia el norte. Grau ordenó que la más rápida Unión
Persecución naval entre buques peruanos y chilenos el 8 de octubre de 1879
1.
2. Al amanecer del miércoles 8 de octubre, las naves de guerra peruanas
navegaban con rumbo Norte. A las 3:30, se avistan mutuamente en rumbos
opuestos, los buques peruanos ' Huáscar y BAP Unión, al mando del
contralmirante Grau, con la 1ª División naval chilena (Blanco Encalada,
Covadonga y Matías Cousiño), al mando del capitán Riveros, que trataban
de cerrarles el paso al norte. Identificados los humos por los vigías del
Huáscar, Grau ordenó las maniobras evasivas, poniendo proa al oeste y
luego, ordenó sucesivamente poner proa al sudoeste y al norte. La BAP
Unión botaba, a próposito, gran cantidad de humo, por lo que el Blanco y
la Covadonga empezaron a seguirlo, dando tiempo al Huáscar de
desplazarse al norte. Recién a las 5:40, Grau identificó a los buques que lo
perseguían: el blindado Blanco Encalada, la goleta Covadonga y el
carbonero Matías Cousiño y al notar que la distancia, que era de 6 millas, se
mantenía o aumentaba, ordenó reducir la velocidad a unos 9 nudos
mientras la división de Riveros navegaba entre 7,5 y 9 nudos.
3. A las 7:15, los buques peruanos divisaron otros tres humos hacia el noroeste, en la misma
dirección hacia donde navegaba la formación peruana: era la 2ª División naval chilena, a
una distancia de 22 millas, conformada por el blindado Cochrane, la corbeta O'Higgins y
el transporte artillado Loa. Grau ordenó, a las 8.30, aumentar la velocidad, llegando a
10,75 nudos y poner proa al noreste, pero el Cochrane llegó a 12 nudos. Los buques
peruanos tenían el paso al este cerrado por la costa, el Noroeste, por la División Latorre y
al Sur por la División Riveros, no quedándoles otra opción que forzar rumbo al norte.
Comprendiendo que la única posibilidad de escape estaba del lado de la corbeta Unión,
mucho más rápida, Grau ordenó que aprovechara su mayor andar y se dirigiese a Arica
donde fondearía hasta la madrugada del 9. Ante el escape de la Unión, los buques
chilenos O'Higgins y Loa inician su persecución, dada la baja velocidad del O'Higgins
este se fue quedando atrás, ordenando al Loa seguír a la corbeta. Este, el Loa, logró en
cuatro ocasiones ponerse al costado de la Unión5 y rompiendo fuego sobre esta con la
esperanza de que se detuviera a responder y así darle la oportunidad de acortar distancia
a la O'Higgins,6 más dada la amplia distancia que separaba a estos dos buques de la
O'Higgins, el comandante del Loa, Javier Molina, suspendió la persecución hasta esperar
las indicaciones del comandante de la corbeta chilena,7 quien a las 19:00 desestimaría la
persecución al ver que la distancia que les llevaba la Unión no lograrían acortarla8
permitiéndole así huir a la Unión gracias a su mayor velocidad.