Jesús sana a un hombre paralítico, Él tiene el mismo poder sanador hoy, no sólo puede sanar o suplir nuestras necesidades físicas, sino también todas nuestras necesidades emocionales y espirituales, Él es el sanador, el Salvador, el que nos perdona y nos dice no peques más; podemos dejar el pecado sólo con la ayuda de Dios, solos no lo lograremos! Buscad a Jehová mientras pueda ser hallado Isaías 55:6