LABERINTOS DE DISCIPLINAS DEL PENTATLÓN OLÍMPICO MODERNO. Por JAVIER SOLIS NO...
Es una traviesa esa raya
1.
2. ¿TE CONSIDERAS BUEN OBSERVADOR?
VAMOS A VER SI ES CIERTO, AQUÍ VERÁS
COSAS INQUIETANTES, IMÁGENES DE
FANTASÍA: UNA RAYA TRAZADA CON EL LÁPIZ
HA COBRADO VIDA Y VIAJA POR LUGARES
RAROS, ASOMBROSOS, IMPOSIBLES, AL
PASADO, AL FUTURO, A LO MÁS
REMOTO E INEXISTENTE,
SÍGUELE LA PISTA
3. Pintas una raya, pintas una raya muy larga en tu
cuaderno. La punta del lápiz patina sobre el
papel y resbala hasta la orilla de la hoja
4. Luego la raya que pintaste se sale del cuaderno,
atraviesa tu pupitre y va buscando qué tan larga
puede ser, a lo mejor como un cabello de
Marina, como una pesadilla o un castigo
5. Se hace a ratos transparente, a veces se
tropieza entre las grietas garabatos del
pupitre
6. Ahora baja por la pata tan veloz que ya nadie la
dirige sino la ley de gravedad y esa prisa
endemoniada que lleva tu raya desobediente
7. La raya que pintaste atraviesa el azulejo,
quiere salirse del salón, empezar ahora
mismo su recreo
8. Ha dejado un surco tembloroso, un caminito de
hormigas. Ya nadie nota que ahí se está escapando
una línea chueca.
9. Tú te fijas dónde se atora, dónde duda o se desvanece,
dónde da vuelta o se hunde la raya que salió de la
punta de tu lápiz.
10. Que se soltó de tu mano y cruzó el peligrosos salón entre
mochilas como una calle transitada, como un sendero entre
montañas, como una serpiente o un río.
11. Tú miras fijo por no perderte sus avances. Quisieras irte
tras tu línea, seguirla por todo el patio como un hilo
que te lanzaran desde una cueva para orientarte.
12. Fue demasiado lejos, dejando huellas en los mosaicos.
Dejando el suelo repartido en dos porciones
13. De un lado, tu zona franca, tu hortaliza, tu equipo, tu
cancha, tu tapete; del otro, los monstruos raros
14. Nadie lo sabe, nadie ve la línea sino tú. Pues tú
la cachaste huyendo de tu lápiz como un
suspiro, como una bola que salta el muro y
abandona feliz el campo de beisbol
15. Mientras todos alzan la vista hipnotizados y tú miras al arroyo
imaginario de tu línea. Y con un dedo mojado pasas por encima de su
rastro como borrando, o decidiendo hasta dónde está la zona de los
niños despistados que no vieron ni de broma el paso de tu línea.
16. Los otros niños pintan en su cuaderno las líneas rectas que
les dijo la maestra, obedientes líneas cortas que se dejan
conducir como cabritos. Tú no has hecho la tarea de
geometría, sino un rayón emocionado saliéndose del forro
17. No te atreviste a usar otra vez el lápiz, lo guardaste en su
estuche calladito, cansado y triste de haber perdido aquella
línea tan briosa. Tu lápiz ya no quisiera pintar más rayas
escapistas en su vida, sólo círculos que vuelvan, que den
vuelta a las monedas como anillos, soles amigables latiendo
entre renglones como letras en la cárcel.
18. ¿Seguiste la ruta de tu raya? Los niños midieron con sus
reglas sus líneas formaditas, inclinadas y dormidas. Tú no
podías medir tu raya porque era eterna
20. Apenas suene la campana vendrán por ti y te llevarán
por calles curvas hasta tu casa, en dirección opuesta
al camino fulminante de tu línea.
21. Ayer volvista a ver pasar tu línea correlona como el
conejo de Alicia, como un cometa, como un delfín en
el mar de los adoquines. Pasó veloz, haciendo
tambalear los trompos y matatenas.
22. Solamente la adivinaste cuando era tarde para seguirla tras la
esquina, pero viste cómo iba haciendo esa grieta tan conocida
desde muy lejos, cortando tu cuarto en dos.
23. Tu casa en dos, la parte derecha del mundo y la parte
izquierda, la zona tuya y la zona donde tu sombra va
caminando: ¡Salta para este lado!, le gritas siempre.
24. Si tú saltas para allá, ¿qué pasaría? ¿Te quedarías
encantado como estatua? Quizá te salgan alas o
escamas de serpiente, una joroba, una aleta.
25. presentan al revés. A veces sueñas con un puente que cruce tu línea
loca para dejarte conocer la parte izquierda de todo, la otra mitad del
cuarto o del salón, la mitad donde tu sombra baila y baila con los
niños despistados que parecen tan alegres y tan “idos”
26. Pintaste tu raya un día, y la raya se siguió por su cuenta y riesgo y ya
no sabes si vas dentro o afuera de la raya que pintaste. Te regañó la
maestra por no haber hecho la tarea de geometría pero el profe de
geografía se entusiasmó.
27. Corre el tiempo más aprisa que tu línea, que ahora va cansada y
meditando porque anda indecisa de dónde empieza tu zona y dónde
acaba, y va siguiéndole la pista, como un perro. Mientras tu sombra, que
ha crecido, le pisa los talones, risa y risa.
28. AHORA TE TOCA A TI…
TRAZA UNA RAYA CON TU LÁPIZ, DÉJALA
CORRER, POR CUALQUIER LADO DE UNA HOJA
BLANCA, HACIENDO CURVAS, ESPIRALES,
HÉLICES, LETRAS, CAMINOS SINUOSOS QUE SE
CRUZAN Y SE CRUZAN.
¡¡¡¡¡QUÉ DESASTRE!!!!
29. PERO…¡¡¡¡¡¡ESPERA!!!!!
OBSERVA BIEN, BUSCA AHORA ENTRE ESA MARAÑA
DE LÍNEAS, DE SEGURO DESCUBRIRÁS FIGURAS
ESCONDIDAS QUE PARECEN ESCAPAR DEL RAYADO.
¿LAS IDENTIFICAS?
COLORÉALAS Y MUÉSTRALAS A TUS COMPAÑEROS.