El documento es una obra de tres movimientos que describe la vida sin propósito y la desesperanza a través de los ojos de un gusano. El gusano se arrastra entre los restos de seres amados devorando cadáveres en un ciclo sin fin de movimientos ventrales. A pesar de no tener elección en su labor de limpieza, el gusano no se siente orgulloso de ser un agente de la muerte. Al final, solo quedan los movimientos eternos del gusano entre las vísceras podridas, sin sentido de la
2. “Preludio”
Léase en SI menor. En esta vida, mi querido amigo, todo es caos. Lo que
pareciera ser obra de Dios, del Destino, de la Fortuna, y todos esos entes
que pongo en mayúscula porque así se me ha dicho que se escriben; no es
más que un cúmulo de eventos, circunstancias y decisiones.
He venido entonces no con buenas nuevas, sino con el desprecio que me
caracteriza, a contar una historia digna de los muertos vivientes, de todos
esos cadáveres en vida que se dicen humanos. He venido con una canción
sobre la desesperanza.
Traigo apatía y tristeza, llanto de un pueblo desalmado y sin dientes que
apretar ante los latigazos del caos, Un pueblo hambriento de felicidad,
pero no la prometida por los pantallazos del mercado, sino que una
felicidad pura.
3. Primer movimiento
No hay propósito en esta vida mi amigo
Movimientos ventrales perpetuos
Infinitas bocas envueltas en fluidos
Devorando la carroña
Que alguna vez fue
Un hijo
Un Padre
Un amor
Pero ahora solo es alimento para la familia
Y de gloria eso no me llena
Ni me enorgullece mi labor
De limpieza
De devorar lo amado, lo odiado y lo carnal
Movimientos ventrales perpetuos
Vida sin propósito
Abro surcos entre las tumbas
Abriendo caminos a la colonia
¿Yo?
Eso no existe
Solo existe el sobrevivir
No vivir
Aquí no hay más vida que la de nosotros
Arrastrándonos entre los ojos de tu padre
Comiéndonos los labios de tu madre
Derritiendo la piel de tu hija
Desintegrando las manos de tus hijos (Tan bellas que te eran)
No me enorgullece
Ser agente de la muerte
Para limpiar su sucia labor
Cargada de cadáveres en su camino
Movimientos ventrales perpetuos
Entre las vísceras infinitas
Banquete
Lo de hoy y mañana y por siempre
Arrastrándome por entre la carroña
Ya se perdió el sentido
4. Segundo movimiento
Silencio por favor
Que el sueño que te espera es impaciente
Y no permite retraso alguno
Y ni con el rostro destrozado
Tendrá compasión
Ambos sabemos que es imposible evitarlo
Ese deseo invasivo de noche aletargada de verano
No puedo dejar de acercarme
No puedo detenerme
Puedes correr y debes correr
Sabes que él no esperará por ti
No entiendo lo que dices
Debe ser por la pasión de mi carne
Que no se detiene ante nada
Ni siquiera ante tus movimientos ventrales
Que me tienen loco
Que le dicen a mis manos
Aquí, en mi pecho
Aquí, en mis glúteos
Aquí, tú ya sabes
Si que sabes
La verdad es que si, no puedo negarlo
No puedo detenerme
No...
Para cuando volví en mí
La cama
Yo
Tú
Manos
Vientre
Y todo eso
Tan hermoso y apasionado
Yacía
Sin pulso
5. Tercer movimiento
En esta vida mi amigo no hay final
Solo eternos movimientos ventrales
Dientes sobre las pegajosas carnes
Antes padre e hijo
Alguna vez
Ahora carroña
No me siento orgulloso
Ni puedo tentar a Dios y pedirle un alma
Como la que solía tener tu amado
Ahora... mi comida
No tengo la culpa
Entre los ojos de tu padre
Entre los labios de tu madre
Entre los dedos de tu hijo
No me enorgullece
Mas mi labor no he elegido
A voluntad
Ni siquiera
Los eternos movimientos ventrales
Hoy, mañana y nunca
Entre las vísceras podridas
Entre las flores secas
Entre la sangre derramada
La vida pierde sentido
Se llega al final del camino
Y solo quedan
Eternos
Movimientos
Ventrales
De gusano