Este poema es una despedida de alguien que ha fallecido, quien les pide a sus seres queridos que no se entristezcan por su partida porque ya está en paz siguiendo el camino de Dios. Les desea que recuerden los buenos momentos que compartieron y que llenen el vacío con recuerdos alegres en lugar de con dolor, ya que su vida estuvo llena de amigos, alegrías y amor.